Zona-Cue
Mi triste despedida
Un domingo en mí
piscinita tomando
una copita de ma-
racululo con mi
vestidito de baño
con rayas naran-
jitas, azulitas, ro-
saditas y blanqui-
tas. Hasta que
recibí una llama-
da mi jefa. Ense-
guida me vestí,
me puse una blusa
muy bonita y un
jean
largote
cuando estaba
saliendo contesté
la llamada, en la
que decían que
me habían despe-
dido.
Una parte de mí
se fue y mi otra
parte se murió me
quede con mi
madre
en
su
enorme
casota
unos días; porque
no pagé la luz, el
gas, ni el agua.
Maracululo. Una com
Maracuyá con jugo de