E
l Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH), fue creado a
través de la Ley 1448 del 10 de junio de 2011 [1]; con el objeto de
recuperar y conservar la memoria del conflicto armado interno
en Colombia y defender el derecho a la verdad.
El Gobierno de Duque está empeñado en “hacer trizas las paz”,
por esta razón nombró como director del CNMH a Darío Acevedo, quien
categóricamente ha negado la existencia de un conflicto armado y ade-
más ha censurado sin argumentos investigaciones producidas hasta
ahora por el CNMH.
El 3 de febrero se conoció que la Coalición Internacional de Sitios de
Conciencia, que es la Red Internacional de Memoria más importante del
mundo, expulsó al CMNH por no suscribir los principios de Memoria His-
tórica, que incluían el reconocimiento del conflicto armado en Colombia
y el derecho a la verdad de todas las víctimas.
La Red Colombiana de Lugares de Memoria, que agrupa a 38 sitios de
memoria de comunidades afectadas por el conflicto interno, anunció que
se retirará como miembro del CNMH hasta que la entidad ratifique los
Acuerdos Internacionales que brindan garantías a las víctimas. Por otro
lado, el Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movi-
ce) exigió la renuncia Darío Acevedo [2].
La eliminación del opositor político, un crimen que continúa
La Comisión de Justicia y Paz, el Colectivo de Abogados José Alvear Res-
trepo y la Coordinación Colombia, Europa, Estados Unidos y la Jurisdic-
ción Especial para la Paz, acaban de publicar el Informe ‘El rol de la Inte-
ligencia Militar en los crímenes de Estado’, donde revelan que entre 1977
y 1998 la Inteligencia Militar asesinó a 51 civiles, despareció 70 y torturó
35 [3].
El Batallón Charry Solano (Binci) funcionó desde 1962 hasta 1985, pero
una vez disuelto, la Brigada XX asumió sus labores y funcionó hasta 1998,
cuando también fue clausurada debido a los crímenes de lesa humani-
dad cometidos por esta unidad militar [4].
En el Informe queda al descubierto la persecución, los seguimientos, las
investigaciones, las infiltraciones, las torturas, los asesinatos y la desa-
SOLUCION POLITICA
17