Revista Innombrable #9 - Mnemosyne "Memorias de la Literatura" (2019) | Page 49

Boyacá 06 de 2019
Gabriel Jaime Giraldo Flórez (Colombia)
I
Constante tormenta implacable
Que golpea la alienada imaginación,
Esa elegante e infinita deidad.
Caminar sediento de profundidad;
Consciente de la sutilidad y
La finitud del ser.
Caminar sediento hacia la nada.
Constante tormenta implacable
Que Enciendes en odio y frustración,
El hombre al ver la muerte al asecho.
Cáncer que carcome e inquieta;
Abominable desesperación del
Amanecer próximo.
Néctar dichoso: el olvido.
Visceral peregrino interior;
Caminante errante purpureo;
Profundo dolor agudo.
Profundo dolor agudo
Que en color sangre bañas
El último gran paso;
La libertad en Carr.
Agónico ser indolente
Cuya proyección pulula.
Virus Insaciable.
Agónico y caprichoso,
El moribundo al ver
Su banal obra.
El patíbulo te llama.
Observador impensable,
Resignado a su propio olvido.
Suicidio metafísico.
Exterminio sistemático,
Goce teologal.
Placer voluptuoso.
Devóralo todo.
Imperceptible ya...
Entre sueños y agonía.
La eterna nada.
Invalidez cosmogónica,
Deja ya tus pasos.
Deja la autocompasión al hombre.
A bordo,
En su tiempo;
En su espacio...
En su miseria.
Deja ya la infinitud
Que nos cautiva,
Que envidiamos.
Para morir ahogados,
Sin fin ni añoranza.
En la desesperación;
En nuestra bilis y desesperanza.
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