Revista Innombrable # 6 - Eterno Femenino Cuerpo y Erotismo - 2014 | Page 73
sin más, tirar el brinco hacia el vacío
evaporarse de un sólo tiro,
representar aquel poema de Rimbaud
y también los que somos cobardes
los que miramos el barranco y nos da miedo quedar vivos
pero no por eso somos insensibles
a todas tus insinuaciones,
te hacemos nuestra en una noche
con el afán de que al despertar
nos abandones, y sencillamente nos dejes allí
tumbados sobre la cama
con la respiración ausente
haciendo nuestro cuerpo un paraíso
para los gusanos.
Tan sólo tenía trece años cuando te mire por primera vez
estabas debajo de aquel tráiler,
secando las lágrimas de un pequeño,
te pregunté: ¿por qué a él?
y con una sonrisa coqueta
dijiste: esto no fue cosa mía,
también te recuerdo junto a la tumba de mi abuelo
consolando aquellos rostros dramáticos
que tenían años de no verle,
y la primera vez en mis sueños
que con el mismo tacto de una ametralladora
me preguntaste por el padre que mi niñez adoptó.
Nunca fuiste tan hermosa hasta aquel momento
mis lágrimas eran tantas
que el mar las hacía suyas,
Necesito un corazón sólo de adorno
para no llorar tu ausencia cada noche
67