Revista Indie Locus. Número 1. Nov-Dic Revista Indie Locus 1. Oct-Nov 2015 | Page 24
metascore (73), pero lo cierto es que nada más
lejos de la realidad, tras la adquisición llegaron
muchas de las películas más interesantes, como
Ratatouille, Up, Wall-E o Toy Story 3.
Aún así en los últimos años parecía que la
magia sí que se había perdido, de repente tan
solo se hacían continuaciones de viejas películas,
tras Up (2009) se lanzaron Toy Story 3
(2010), Cars 2 (2011) y Monsters University
(2013). La única excepción fue Brave (2012)…
y de repente Pixar se había convertido en
Disney. Hasta Brave, todas las historias de Pixar
giraban en torno a una idea central que ahora
se ha convertido en meme “¿Qué pasaría si
algo o alguien tuviera sentimientos?”: Juguetes
con sentimientos, coches con sentimientos, peces
con sentimientos, robots con sentimientos ¡los
ancianos también tienen sentimientos!
Qué pasaría si los (juguetes, bichos, monstruos,
peces, superhéroes, coches, ratas, robots, perros,
Escocia, SENTIMIENTOS) tuviesen sentimientos
De repente, en Brave la historia cambia para
asimilar la propia de Disney: “contemos un
cuento sobre princesas”. Sí, una princesa
guerrera y libre “que está de moda lo del
feminismo”, pero princesa al fin y al cabo ¡Hay
hasta un rey que es la viva reencarnación
bonachona del Sultán de Aladdin! sin su lado
más bobalicón. Además, la historia no es
precisamente el colmo de la innovación: familia
unida, conflicto familiar que pone en peligro a la
familia, un “ponte en mi lugar” al uso y
desenlace amable. Eso si, a nivel técnico es
sublime ¿en serio esos pelos y esas físicas de
tejidos están hechas por ordenador? Parece ser
que se olvidaron de la historia y se centraron en
la innovación tecnológica.
Quizás la pérdida de calidad de las últimas
películas de Pixar tenía que ver con la falta de
inspiración. John Lasseter, el alma mater está
ahora más centrado en los propios Walt Disney
Animation Studios que en sus propios estudios.
Además, desde 2006 el estudio no había
parado, iban a película por año. Algo había que
hacer ¡y vaya si lo han hecho! Los fans
pedíamos una buena historia, de esas que en
Pixar siempre han sido expertos en contar. La
inercia de Pixar era obvia, cada vez giraban
hacia historias más adultas, hasta que en 2009
nos ofrecieron esa joyita del cine que es Up
¿quién sino pixar iba a poner como protagonista
de una película de animación a un anciano?
Pensaban los directivos de Disney: “¿Cómo se
podía sentir identificado el público infantil?
¡Tenía que ser una película para todos los
públicos!”. Estaban que se tiraban de los pelos y
recuerdo las noticias por aquel entonces, muy
excépticas. Aún así la película fue todo un éxito.
Aquel arriesgado proyecto fue liderado por
Peter Docter, que ya había dirigido en 2001
Monsters S.A. además de participar como
guionista de otros muchos éxitos de Pixar. Tras