Revista Huracán - Edición número 17 N° 17 | Page 15

¿Qué es de la vida de…? | Por Nicolás Roncoroni
“Cuando estaba en inferiores, en mi casa no se vis-
lumbraba la posibilidad de que alguno no estudie.
Por eso, ingresé a la Facultad y logré recibirme para
el 1990. Hice el final de la carrera mientras estaba en
Primera”, rememora uno de los referentes del Fútbol
Senior del Globo.
Viéndolo con el diario del lunes, ¿les agradecés a
quienes te recomendaron seguir una carrera en pa-
ralelo al fútbol profesional?
Sí, totalmente. Aparte, los ejemplos eran bastante pa-
téticos por aquel entonces. Había mucha gente que,
a los 37 años, se retiraba del fútbol y se quedaba sin
nada. También, fueron importantes los entrenadores
que me dejaban estudiar sin problema.
GONZALO HORVATY
¿Hay muchas diferencias en las ganancias de tu épo-
ca con respecto al hoy?
Claro. El porcentaje era muy bajo de los que se sal-
vaban por la carrera. Diría que solo un 10%. Se podía
vivir, pero si no hacías buenas inversiones, el futuro era
complicado.
¿Ayudó en algo el fútbol de Primera División en tu
siguiente experiencia laboral?
El fútbol me permitió saber cómo era la gente. Uno
reconoce cuando te miente y en qué ocasiones no lo
hace. Igual, sigo siendo ex futbolista. Si me preguntan
que soy, siempre digo ex arquero y no abogado, ja.
Urquiza siente una gran representación por el conjunto
de Parque Patricios. Cada vez que tiene la posibilidad
de visitar las distintas áreas del club, la emoción flore-
ce en su cuerpo y los recuerdos se apoderan de sus
pensamientos. “Entré a Huracán en infantiles en 1976.
Seguí hasta el 84´ hasta llegar a la Primera. Hice una
vida en El Palacio y demás lugares. El fútbol me llevó
por todos lados, pero el sentimiento está siempre pre-
sente”, comenta el portero.
GONZALO HORVATY
¿Qué fue lo mejor que te dio el resguardar el arco
del Globo?
Jugar con amigos a la pelota. Compartí equipo con
Carlitos Torino, Eduardo Papa… Toda gente que cono-
cí de chico y todos logramos llegar a la Primera. Esas
cosas no tienen precio.
¿Y cómo fue el debut con la casaca quemera?
Recuerdo que debuté en Cipolleti con Sebastián Vi-
berti. En mi primer partido, me hicieron un gol de mi-
tad de cancha. Después, por suerte, lo empatamos.
Me quedó como un ícono de mi carrera, ja. Estuvimos
un año muy bien y, lamentablemente, no se nos dio. Al
siguiente, Huracán ascendió.
¿Qué se te viene a la memoria cuando te hablan de
Sebastián Viberti?
Era un entrenador moderno y una persona derecha.
Trataba de utilizar los métodos de ahora, me enseñó
GONZALO HORVATY
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