Revista Huracán - Edición 15 REVISTA HURACAN - diciembre final - simples | Page 8

a la Alcorta’, ahora me toca estar al lado del banco de suplentes. Pasé de no querer ir a la Sede de chico a terminar siendo el Presidente de la Sede, ahí arranqué con la ayuda de Mirian Mulet, que la verdad por ella y por su trabajo soy la persona que soy, la verdad se lo tengo que agradecer. En todo este tiempo te tocó vivir cosas increíbles, ¿cuál se te viene a la mente? Una de las cosas más locas es la camiseta de Los Re- dondos, idea que con Santi Vila, otro enfermo mental por Huracán, se nos ocurrió copiardelos Beatles con Liverpool. Él es un fanático del rock también y me dijo ‘Fer, tenemos que hacer la remera de Los Redondos y la vamos a hacer’. La verdad es que gracias a Javi Montanari llegamos a una persona que hace cosas con Rocambole, él nos autorizó, nos dijo que el símbolo era el esqueleto de la cara de Oktubre con las cadenas y bueno lo hicimos. Yo soy un fanático del rock y tuve la suerte de que La Renga, Los Piojos y Los Redondos tocaron en nuestra casa y que antes me acompañe mi papá en el primer recital de Los Redondos y después gracias a Abel Poza y a un amigo de él, lográramos que llegue la camiseta al Indio, eso fue impagable. No- sotros quisimos que se saque una foto y por confusión le pedimos un autógrafo. Podes creer que el hombre va y me firma el autógrafo en vez de en un papel, en la camiseta y ‘con cariño para Fer’. Hoy la tengo en un cuadro, ahora te digo que esa es la camiseta más linda, ja”. Hablaste de tu vieja con el recuerdo de las primeras casacas y también con tu viejo acompañando en ese primer recital de Los Redondos. ¿Cómo viven los tres su vida ligada al club? Mi viejo labura en la Sede igual que mi vieja, ambos están jubilados y lo hacen para darle una mano al club. Mi mamá era hincha de Vélez, mi papá odiaba a Vélez y bueno por amor hoy ella es hincha de Huracán ya hace más de treinta años. En el 2009 le dije a mi mamá que si Vélez salía campeón que cuelgue la bandera y me dijo que miró el partido con un gorro de Huracán y cuando Brazenas no cobra la falta insultó a la tele, tiró todo y nunca colgó ninguna bandera. Me imagino que entre tantas camisetas te deben usar alguna… Mi mamá y mi papá no son de usar las cosas del club. Yo si me voy, me gusta que tengan una camiseta. Lo mejor que me pasó es tener una foto de cuando ascen- dimos en Mendoza, que fuimos en micro y le sacaron una foto a ellos festejando, uno con un buzo de arque- ro y otro con la ropa de Huracán. ¿Qué te genera vivir todo esto en el club? Siempre está el respeto con todos, pero me genera admiración haber estado por ejemplo con Chizzo de La Renga o con los jugadores. Que a la práctica venga por ejemplo la Anguila Gutiérrez, haber compartido con el Turco Mohamed o mismo la relación que quedó con Gustavo Alfaro, entre otros. Es muy loco que los ídolos que veías por televisión ahora compartas una mesa con anécdotas o una charla en algún viaje. Eso es muy lindo. ¿Cómo son esos viajes? Fuiste a todos lados como hin- cha y ahora te toca ir a todos lados a cargo del Plantel… Para mí son ahora un problema. La gente te dice ‘qué lindo es tu lugar‘ pero tenés que estar las 24 hs pen- diente de que el avión salga, de que la utilería esté, la lavandería funcione, que a los jugadores no les fal- te nada, que haya nutrición, los traslados, las canchas para los entrenamientos, las familias de los jugadores. Ya no se disfruta sino es más una preocupación y una responsabilidad. Es muy lindo de todas maneras y es lo que me gusta. En esta vorágine que viviste y después de tantos años, ¿cómo podrías definir a Huracán? Es un hermoso club con una sumatoria de voluntades. No nombro a nadie en especial porque son todos lo- cos, que fueron a todos lados, les dan su trabajo, su vida y su tiempo. Todos esos locos que nos veíamos estamos hoy acá y es una buena juventud que hace que el club sea un conjunto de esfuerzos que lo hacen cada día más lindo. ¿Qué significa este club para vos? Es todo. Tengo cuatro tatuajes, me levanto en La Que- mita y me acuesto en la Sede o en el Estadio. Mi casa es todo Huracán, entrás y todo es por y para el club.