Importancia de la Estetica en el Diseño Grafico
En este artículo se comenta una de las partes que forman a un diseño, que es su aspecto estético. Se ha comentado que la estética no es el aspecto definitivo, no deja de ser una parte de gran importancia y que vale la pena comentar. Se tiende a valorar la calidad estética de un diseño refiriéndose a si es más o menos bonito. Cuando tratamos erróneamente la parte estética de esta manera, estamos hablando de algo que es claramente subjetivo, ya que la parte estética a primera vista puede ofrecer una atracción o un rotundo rechazo, pero esta decisión determinada según el individuo que lo observe. La valoración de una verdadera calidad estética en un diseño depende de la calidad del mensaje que transmite y al público al que va dirigido. Pensando en diseñarlo en todo momento con una coherencia, una coherencia estética, entre el producto promocionado y el diseño que se realiza para la promoción. La importancia de la parte estética reside en el enfoque y en el estilo estético que se le da al mensaje, debe estar pensada y adecuada para el público objetivo que será el receptor. Esto, es de una importancia decisiva para una buena efectividad en el contenido del mensaje original, ya que un mal enfoque en este aspecto puede debilitar o reforzar el mensaje según su buena o mala aplicación. Por ejemplo está claro que todo diseño tiene una estética personalizada, con un estilo propio y que va enfocado a un público específico. Por eso, es impensable poder utilizar el mismo estilo en los diseños para una marca de vino que para un taller mecánico. Una vez elegido el estilo adecuado para el mensaje y para el público objetivo, entonces si, que es el momento de plantear el grado de calidad de un diseño, que es donde entraríamos a valorar si es más o menos bonito. Unas de las ventajas de elaborar una buena estética en un diseño es que ofrece un mayor placer visual para el observador, aumentando su tiempo de percepción. Si el diseñador es capaz de conocer las preferencias del público objetivo puede conseguir atraer y retener la atención del observador consiguiendo que este mensaje sea recordado fácilmente durante mucho más tiempo. Cuando un diseño cumple todos estos objetivos y ha logrado un gran impacto es perfectamente posible que perdure en el tiempo, y que sea conservado siguiendo transmitiendo su mensaje, y aunque esto no haya sido previsto por el diseñador se convierta en una obra de arte pasando de mano en mano y exponiéndose.