Liberalismo económico en el siglo XIX
La doctrina económica liberal se había desarrollado a finales del siglo XVIII, el crecimiento de los mercados mundiales de bienes y de factores de producción hizo que las ideas del liberalismo ganasen apoyo entre los industriales, los comerciantes y los inversionistas, los gobiernos influidos por estos grupos fueron adoptando medidas económicas liberales, se permitió la libre circulación de productos, capital y trabajadores, permitiendo sus movimientos dentro y fuera de Europa.
Algunos representantes del liberalismo económico son:
Adam Smith (1723-1790):
Demostró que la fuente de todos los ingresos y la forma en que se distribuye la riqueza, radica en la diferenciación entre la renta, los salarios y los beneficios o ganancias. Si la producción y el intercambio de bienes aumenta, el nivel de vida de los ciudadanos se eleva; el empresario privado puede actuar en libertad mediante una regulación y un control gubernamental mínimos.
David Ricardo (1772-1823):
En su teoría del valor - trabajo, explica que los salarios dependen del precio de los alimentos, y este de los costes de producción, los cuales dependen a su vez de la cantidad de trabajo necesario para producir dichos alimentos. Sostuvo que el trabajo es el principal determinante del valor.