Revista Foro Ecuménico Social Número 11. 2015 | Page 30

Atrio de los Gentiles en la Argentina Es posible trabajar juntos, en equipo, mancomunadamente en pos de objetivos comunes que nos representen a todos, sin distinción de credos o de opciones políticas. En este marco, una voz que se destaca en medio de tantas disonancias, es la voz de Bernardo Kliksberg. Considerado un precursor de la responsabilidad social empresarial, ha escrito más de medio centenar de libros y cientos de artículos de investigación, que constituyen una bibliografía insoslayable para todo aquél que quiera entender de qué se trata el acuciante problema de la lucha contra la pobreza, la ética del desarrollo, el capital social y la gestión social. Asesor de diversos organismos internacionales, hombre de una vastísima actividad académica y profesional, acredita también un encomiable testimonio de compromiso con el voluntariado social. Sería por demás dificultoso resumir aquí lo copioso de su obra, la excelencia de su aporte, la diversidad de su infatigable labor en varios países del mundo y la notable creatividad, hondura y claridad de miras a lo largo de todo su accionar público. Ha sido asesor de la Directora General de la Organización Panamericana de la Salud; integrante de la Comisión Asesora de los Informes de Desarrollo Humano de Argentina, Perú y otros paí- ses de la región; integrante del Comité Directivo del Alto Panel de expertos en seguridad alimentaria; Asesor Principal, para América Latina y el Caribe del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo, entre otros importantes cargos. La Universidad Católica de Córdoba, como Universidad confiada a la Compañía de Jesús en Argentina, reconoce hoy en la persona de Bernardo Kliksberg el empeño de una vida dedicada a brindar una solución viable a los grandes desafíos que la desigualdad social plantea a nuestro tiempo, particularmente en la herida geografía de nuestro continente latinoamericano. La disyunción entre ética y economía, entre persona y capital, entre las necesidades urgentes de nuestra región y los recursos con los que contamos, han sido algunas de las principales preocupaciones de Bernardo Kliksberg. Mayor felicidad hay en dar que en recibir. Es posible trabajar juntos, en equipo, mancomunadamente en pos de objetivos comunes que nos representen a todos, sin distinción de credos o de opciones políticas. La Universidad es el ámbito propicio para promover y hacer cada vez más fecundos estos vínculos interdisciplinarios donde dialogan el Estado con la sociedad civil, las Ciencias con la realidad concreta de nuestro país y de nuestra región. El nuestro es un tiempo para construir, un tiempo para recuperar la esperanza. Gracias, Dr. Bernardo Kliksberg, por inspirarnos en esa brecha.• Exposiciones del P. Alfonso Gómez al otorgarse los Doctorados Honoris Causa en el marco del Atrio de los Gentiles, en la ciudad de Córdoba, Argentina. 30• FORO