Revista Foro Ecuménico Social Número 10. 2013 | Page 36

Diálogo Intercultural Ese es el desafío que tenemos por delante los líderes religiosos. Crear convivencia que nos permita celebrar juntos, y así hacer de este mundo, un mundo muy diferente. 54• FORO vivencia. Para finalizar este recorrido nos encontraremos con el Papa Francisco en el Vaticano. Esta idea es fácil de enunciarla y estamos trabajando para hacerla parte de nuestras sociedades llevando este modelo como ejemplo. Celebración conjunta Hace algunos pocos años atrás, y por dos veces consecutivas, el año nuevo judío –Rosh Hashana–, coincidió con el final del sagrado mes islámico de Ramadan. Este es un hecho poco habitual, puesto que el calendario islámico es lunar y el judío es una combinación de lunar y solar, lo que hizo que posteriormente se fuera desfasando y cada una de ellas se festeje en momentos distintos del calendario gregoriano. En los dos años en que coincidió, el entonces Gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti fue anfitrión de un festejo conjunto, del que participaron líderes judíos, musulmanes y el Arzobispo de Córdoba, en compañía también del Intendente de la Ciudad, que era de un partido político distinto al del Gobernador. Todos juntos, alrededor de una mesa compartimos un almuerzo para festejar. Juntos sin perder la identidad, juntos para mostrar que la convivencia es posible, juntos para vencer prejuicios, juntos para dar un mensaje a los intolerantes, juntos para educar a nuestros hijos y juntos para hacer un país mejor. La fiesta tuvo algunos discursos. Recuerdo haber sido invitado en ambas oportunidades para dar mi mensaje. A decir verdad, en ambas ocasiones repetí lo mismo, pues debía ser un mensaje especial y para esa única oportunidad que se repitió por dos años consecutivos. Mientras comíamos, cantábamos, conversamos y escuchábamos algunos discursos, pasaba algo muy llamativo que no podía dejar de ser señalado. En esas oportunidades dije: “Que distinto sería el mundo si en cada ciudad, judíos, cristianos y musulmanes pudiéramos festejar en conjunto”. Ese es el desafío que tenemos por delante los líderes religiosos. Crear convivencia que nos permita celebrar juntos, y así hacer de este mundo, un mundo muy diferente. Estas situaciones no son producto del azar. Responden a líderes de las comunidades que entendieron que este capital de la sociedad debía ser desarrollado y cuidado. Entre los principales artífices de esta situación se destacó Jorge Mario Bergoglio, arzobispo de Buenos Aires, hoy Papa Francisco, que en su tiempo trabajó denodadamente junto a muchos de quienes formarán parte de la delegación que viajará se manas antes que el Papa a la región; llevarán el mensaje de que a la convivencia la construyen los hombres. Creemos que este mensaje de optimismo argentino da al país un lugar especial cuando se habla de convivencia interreligiosa. •