Revista Especies 1-18 ene-mar 1-18 | Page 37

R EDESCUBREN A LA RATA CANGURO DE SAN QUINTÍN QUE SE CREÍA EXTINTA En esta imagen apreciamos una rata canguro de San Quintín en reposo en el campo; su redescubrimiento es una victoria para la conservación de la biodiversidad en esta época en la que el cambio climático y la extinción de especies se han incrementado, lo que evidencia que la protección de espacios en nuestro país está dando resultados exitosos Investigadores del Museo de Historia Natural de San Diego y la organización sin fi nes de lucro Terra Peninsular, A.C. redescubrieron la rata canguro San Quintín (Dipodomys gravipes) en Baja California y ahora trabajan con las autoridades locales en un plan de conservación. La rata canguro San Quintín fue vista por última vez en 1986 y fue incluida en la lista de especies amenazadas por el gobierno mexicano en 1994. Se pensó que se extinguió debido a la conversión agrícola, pues en las últimas décadas, la región al sur de Ensenada se volvió un importante centro agrícola, convirtiendo enormes áreas de hábitat nativo en campos para tomates y fresas. A pesar de la búsqueda y monitoreo por años, no había habido señales del animal hasta el verano pasado. “Este descubrimiento no sólo es un ejem- plo perfecto de la importancia del buen trabajo de campo de la historia natural a la antigua, sino que tenemos la oportunidad de desarrollar un plan de conservación basado en nuestros hallazgos”, dijo Scott Tremor del Museo de Mastozoología. “La ca- pacidad de llevar nuestra investigación y conver- tirla en esfuerzos de conservación tangibles es emocionante. Es un compromiso para preservar la singularidad de la península de Baja California”. Este pequeño mamífero mide aproximada- mente 5 pulgadas (12.7 cm) de largo con una cola con mechones. Es un herbívoro que vive en las tie- rras bajas áridas y toma su nombre de sus grandes y poderosas patas traseras que lo impulsan a gran- des distancias (como un canguro). Es de mayor tamaño que otras ratas canguro en la región y es más agresivo que sus parientes. Desde el descubrimiento inicial, se ha encon- trado que también persiste dentro de la Reserva 35