Editorial | Mayo 3, 2018
Una jornada revitalizadora para el turf fue
la que se vivió el 1 de mayo, 140 años del
Hipódromo Argentino de Palermo
Fundado en 1876 y con un reconocimiento en toda la esfera turfística, Palermo organizó una jornada
espectacular en materia hípica que se coordinó con el Festival del Caballo Argentino, parte del llamado
Plan Hípico Nacional, que tuvo como escenario al Hipódromo, la Avenida Libertador y el Campo Argentino
de Polo, en una fiesta donde el homenaje estuvo centrado en el caballo y en quienes los rodean.
S
on difíciles los días que vive
actualmente el turf argentino,
donde los aportes derivados del
juego en los casinos, dejarán
paulatinamente de llegar a los fondos
de premios, en medio de profundos
cuestionamientos sobre lo que se debería
haber hecho, sobre cómo se entendió el
concepto del “Fondo de Reparación” y
sobre cómo explicarle al espectro político
que la actividad del turf es una industria que
se debe entender, antes de tomar decisiones
que evidentemente afectarán en lo medular,
aunque probablemente esta crisis situará en
el mediano plazo al turf argentino en un
lugar mucho más real, mucho más sólido,
pues nos parece que los puntos esenciales
están arriba de la mesa... calidad en la
crianza, tradición centenaria, historia de
la buena y un arraigo que es mucho más
potente que depender de un porcentaje del
juego que dejan las maquinitas de azar.
Está más que claro que los caminos
actuales van por el lado de fortalecer el
juego interno con tecnología, información y
una imagen corporativa de primera calidad.
Que el simulcasting “desde y hacia” debe
ordenar sus porcentajes de participación,
pues quienes organizan y mantienen los
recintos hípicos, quienes compran caballos,
quienes crían, deben ser los mayores
beneficiarios de lo que recaude la venta de
las señales internacionales, por cierto que
deben existir intermediarios que entreguen
servicios, pero lejos de ser un pensamiento
romántico, lo que produce el turf debe
quedarse en el turf, porque es la única forma
de que tenga sentido comprar un caballo y
no sufrir en el intento.
Algunos opinan que la poca renovación
en los propietarios y aficionados es otro
de los problemas que se profundizan año
tras año y por cierto que lo es, porque
probablemente los hipódromos llenos
en 1950 se entendían porque no habían
malls, ni Netflix, ni cable HD, ni Internet
y muchos otros elementos que deberían
ser entendidos como herramientas para
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IMPRESO POR
fortalecer y reinventar aficionados, y no
como enemigos indirectos, pues se trata de
una realidad que por suerte no podemos
cambiar.
En el mundo web se manejan los
conceptos de FrontEnd y BackEnd, fácil
de entender si lo explicamos como lo que
ocurre con el visitante de una web en su
interacción con ella y los procesos que
se activan al interior de los servidores y
sus bases de datos, sistemas de seguridad,
entre muchas otras cosas. La analogía
calza perfecto para entender que si bien
existen expertos en ambos conceptos, lo
más recomendable es que algunos trabajen
en el FrontEnd y otros en el BackEnd, mi
duda es si están realmente identificados los
expertos para cada concepto, que podrían
generar cambios realmente significativos
para el turf Latinoamericano?.
Gonzalo Reyes R.
Editor General
PRESIDENTE Javier Said H.
GERENTE GENERAL Gonzalo Reyes R.
GERENTE COMERCIAL Guillermo Gomien S.
VENTAS: Carlos Montes A.
FOTOGRAFÍAS Rafael Reyes R., Juan Ignacio Bozzello, Ariel Fitzsimons, Liliana
Ypenza, Juan Vicente Vergara.
COLABORADORES Sebastian Bravo, Esteban Gárate, Jaime Casas, Freddy Pizarro,
Danyksa Ossandon, Clara Reyes V., Jeanette Couchot F., Phillip Tyrer M., Gonzalo
Gómez, Germán Boiso, Emerzon Vásquez.
DISEÑO GRÁFICO Sylvana Piña B., Susan Castro I.
MAYO 3, 2018 | REVISTA ELTURF.COM /
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