Revista Elevación Nº3 Enero 2015. | Page 13

Superior mientras el péndulo rítmico pasaba por el Inferior, de esta manera polarizaron sus pensamientos y sus sentimientos, llevando sus cuerpos mental inferior y emocional a la Conciencia Superior y, permaneciendo allí, escaparon al bajón que les esperaba cuando el ritmo se manifestaba en sentido descendente. De esta manera, la oscilación de bajada sólo se manifestaba en el plano inconsciente y su conciencia no era afectada. Es lo mismo que levantarse por encima de algo que viene contra nosotros y dejar que pase por abajo, sin tocarnos. A veces empezamos algo con gran entusiasmo, de acuerdo con nuestro ritmo ascendente, de pronto nos entra la melancolía, perdemos la confianza, del optimismo pasamos al pesimismo, nos sentimos inestables y decaemos. Luego, también sin saber por qué, nos sube la moral, reaccionamos, vemos todo con mayor optimismo y nos levantamos de nuevo. Esto es la Ley del Ritmo, pero no es un ritmo loco, por Ley de Compensación la oscilación hacia una dirección determina la oscilación hacia la dirección contraria. En el plano físico lo vemos claramente, por ejemplo, en el péndulo de un reloj. Las mareas se equilibran, las estaciones del año se compensan. La fuerza con que lanzamos un proyectil hacia arriba tendrá la misma velocidad que cuando regresa a la tierra. Y los estados mentales y emocionales de los seres humanos también están sujetos a esta Ley. Una persona capaz de gozar intensamente también es capaz de sufrir intensamente. Es importante aclarar que, a veces, la oscilación del péndulo nos lleva de una vida a otra. Debemos aprender a manejar esta Ley polarizándonos en el punto en que deseamos quedarnos y elevarnos por encima de la oscilación negativa o de bajada. Si conseguimos esto, no nos dejaremos controlar por pensamientos y sentimientos negativos. “Si no lo podemos hacer, podemos invocar a los Seres de Luz y pedirles