Nuestro bienestar, es una condición que se tiene o se llega y para esto, solamente es necesaria nada más que nuestra intención. Estar en el camino espiritual y hacer o tener actitudes o
pensamientos bajos, anula totalmente todo nuestro progreso...
El filósofo Nietzsche, mencionaba que “la filosofía era el deporte intelectual de los que tienen el estómago lleno”. Y si, algo de razón tenía, no da para filosofar cuando el hambre empieza
a sentirse. Y esto en el aspecto espiritual, se puede asociar al hecho de que muchas personas van
experimentando energías como si fueran ideas o deportes. Lo importante de cualquier técnica o
energía, siempre es el efecto sanador que tiene en nosotros mismos para empezar y luego en los
demás. Con demasiada frecuencia, escuchamos “soy Maestro/a de x cantidad de estilos” o
“conozco o manejo x cantidad de energías”. Ok, todo muy bien, si todo esto se ve en los hecho y
la persona es un ejemplo digno de imitar. Pero lo que se ve demasiado frecuentemente es “el/la
Maestro/a” que hace todo por la imagen, ego y bienestar económico.
Todos los que estamos en el camino espiritual tenemos la tarea de guiar a quienes se nos
acercan o difundir, y es muy importante ser consciente y transparentes en esto. Nuestra tarea es
“llevar la vaca hasta el río, pero no beber el agua por ella”. Parece simple, pero no lo es. Y además, tenemos que entender que “lo importante es la carta, no el cartero…”. Me refiero por la
“carta”, a la sanación y al “cartero”, a la persona que ayuda o guía en el proceso.
Desde el momento que es más importante QUIEN hizo algo a lo que realmente HIZO, es
que las cosas están mal. Entendamos bien esto: otra de Jesús “pero tú, cuando des limosna, que
no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha” (Mateo 6:3). El único mérito y reconocimiento
valedero es el de saber que la persona mejoró algún aspecto en su vida. ¡Al fin de cuentas, cuanto más espiritual se va volviendo uno, menos necesidad tiene su ego que le reconozcan lo bueno
que está haciendo!
Además, es increíble cuánta hipocresía y celos hay en el ambiente espiritual. Si bien, hay
muchas personas que con todo el corazón, son devotos a su tarea, también cualquiera que conozca un poco a las personas que se manejan en este ambiente, saben quien es quien. A ver si la
terminan con eso de la envidia, celos, etc. y se deciden a escuchar a sus Guías o hacer lo que les
enseñaron (ej. el Go kai). Recuerden: no pueden esconder sus acciones de los ojos de Dios, tarde
o temprano, van a tener que responder por lo que hagan o dejen de hacer...
Que nadie vaya a pensar que escribo enojado o algo por el estilo, muy por el contrario, me
encuentro muy contento por poder difundir el mensaje de nuestros Guías. Este mensaje no es
nuevo, porque todos los Guías y Maestros Ascendidos lo están repitiendo con distintas palabras
pero con el mismo sentido. Es el despertar (bastante acelerado) a lo espiritual y para esto, necesitan que los/as Maestros/as hagamos nuestra tarea en pos del Bien Mayor y el Plan Divino.
Por todo esto, vuelvo a recalcar con una más de Jesús: “Amaos los unos a los otros, como
yo los he amado” (Juan 13:34) y sólo hace falta mirarnos hacia adentro solamente, al fin de cuentas, “todas las respuestas están en tu Interior” (esto fue dicho por un Ángel).
Continuará...
Fabián Sato
Revista Elevación
“Nuestra gloria más grande no consiste en no haberse caído nunca, sino en
haberse levantado después de cada caída.”
Confucio. (551 a.C. - 479 a.C.) Filósofo chino.
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