Revista Elevación. La revista de la EESO N° 418 - Ceres Numero 1- De manera digital - Año 2016 - Ceres | Page 40

Este adolecente tenía una gran familia, hermosa, grande, muy humilde y con grandes valores, como él. Como todo adolescente, Germán, un sábado salió a bailar con sus amigos, luego de una divertida noche regresó a su casa con un amigo. Llegada la mañana, Germán pidió prestada la moto a su hermano para llevar a su amigo. Tras una discusión de no querer prestarle el hermano, Germán llevó a su amigo en el ciclomotor. Cuando volvía a su casa, sonriente como siempre y pensando en su hermanita mas pequeña, en un momento de descuido PAFF!!! Impactó con la moto en un auto. Y luego de eso, luego de eso… comenzó lo peor. Médicos, ambulancias corrían por su vida. La gente alborotada, su familia preocupada. Y yo… bueno. Yo, pensando en que iba a estar bien, que no le había pasado nada. Yo soy Mayra, una adolescente también, compañera de curso de Germán que cree que él sigue acá. Germán se fue, dicen que a un lugar mejor, por sus valores, humildad y bondad y demás características buenas. Dios lo quiso junto a él, el menos eso dicen. Germén y yo fuimos compañeros, no llegamos a ser íntimos amigos, pero su partida doló mucho en todo el curso. Germán y yo estuvimos juntos en Cataratas, en los grupos de competencia. Germán y yo nos cruzábamos todas las mañanas de camino a la escuela, por la misma calle. Germán y yo viajamos a Carlos Paz juntos, y se subió a un juego conmigo para que yo no tuviera miedo. En fin, Germán y yo ya no nos vamos a ver, ya no va a cobrarme la masa ni vamos a cruzarnos todas las mañanas. Pero si hay algo que vamos a hacer Germán y yo, vamos a seguir conectados, él va a estar en mi memoria y en mi corazón. Él se va a egresar conmigo y su persona siempre va a estar en mí, siempre. A pesar de que no fuimos amigos, Germán y yo éramos compañeros y él, una gran persona, de esa imposible de olvidar.