Siendo todavía una niña , fue la modelo del artista plástico y escultor Armando González “ La niña y la paloma ”, y ese hecho la marcó para siempre . A lo largo de la historia recibió varios emplazamientos , y en todos fue vandalizada , y eso no es casualidad . La escultura ganó el premio Banco República en 1965 , y fundida en bronce , fue emplazada ese mismo año en el Parque Rodó , en una fuente cerca de la esquina de Br . Artigas y 21 de Setiembre . El escultor , unos años después , hizo dos réplicas , una de las cuales fue entregada a Fidel Castro .
La obra fue robada de su emplazamiento original y décadas después , por esos azares del destino , aparece en la casa de un vecino de Malvín , el barrio de origen de artista y modelo , un modelo en yeso bastante deteriorado . Mauricio Rosencof , en ese entonces Director de Cultura de la Intendencia de Montevideo solicita a los restauradores Rubén Fernández y Luis Recobaldi , que funden en bronce dos piezas , una de las cuales se coloca frente al Hospital Pereyra Rosell , detrás del Obelisco , de donde dos veces la intentan robar y en ambas ocasiones le rompen las piernas . Nuevamente restaurada por Fernández , se toma la decisión de retirarla del lugar para reubicarla mejor .
En la actualidad , hay dos piezas en exhibición : una , en el Museo de la Memoria de Montevideo , ubicado en Avda . Instrucciones y José Batlle y Ordoñez . La otra , en el sitio original de Br . Artigas y 21 de Setiembre . muere definitivamente cuando nadie la recuerda ni habla de ella . Por eso estoy convencido de que Corina no ha muerto , vive en nuestra memoria y nuestros corazones .
Jorge Aníbal Cela
Dicen los que saben , que una persona Pag 29