Revista Dracma Septiembre | Page 35

Asia (zona reconocida por su histórica violencia sectaria)los extremistas de ISIS desarrollan una campaña para purificar la raza y las creencias de sus habitantes. El Kurdistán iraquí es uno de los más afectados. En ciudades del norte de Irak los agitadores revolucionarios acosan a los cristianos: marcan sus casas como objetivos, los amenazan de muerte, los obligan a orar sus plegarias, convertirse al Islam, y otra cantidad de acosos y torturas que coartan sus libertades. Miles y miles han huido, se han refugiado fuera de sus tierras o han sido brutalmente Dracma Septiembre 2014 asesinados. No podemos estar de acuerdo que estos crímenes arrasen con una población que solo quiere vivir en paz. El ejército iraquí se ha mostrado débil en materia militar ante la estrategia invasiva de los sunitas de ISIS. No hay prisioneros de guerra en estos enfrentamientos, los radicales no perdonan la vida de los soldados capturados. Grupos paramilitares y armados kurdos son los que verdaderamente están haciendo frente a los yihadistas del Estado Islámico, aunque con bajos presupuestos y armamento militar débil y escaso, pero durante la historia le ha sido efectivo. La débil estructura de los Peshmergas, combatientes kurdos, no sería un problema con el apoyo de Estados Unidos (en desarrollo) y su aliado en Oriente Próximo, Israel, quien sería tal vez el más beneficiado con un levantamiento o victoria nativa, e incluso con la creación del Estado Kurdo. Israel y Kurdistán podrían fácilmente mantener tratos comerciales y diplomáticos más fructíferos: Armas, prestamos, petróleo, asesoría militar, etc. Luego del exterminio de millones de judíos durante la segunda guerra mundial,algunas religiones siguen infringiendo terror y odio en algunos sectores del planeta. Islamistas radicales siguen atentando contra los derechos humanos y evitando el desarrollo de la paz entre naciones vecinas, entorpeciendo gravemente el desarrollo económico de países implicados. No podemos permitir que el acoso de radicales se convierta en un nuevo éxodo y/o holocausto para los cristianos en Tierra Santa. Aunque es el mismo libro santo de los musulmanes, El Sagrado Corán, y otros como la Sunna, los que hacen referencias al Yihadismo para extender la ley de Alá. Su Shahada o confesión de fe funciona como slogan de campaña: “No hay más Dios que Alá, y Mahoma es el Profeta”. Definitivamente el fundamentalismo islámico atenta contra el orden legalmente establecido. El mundo no debería olvidar a los cristianos de Oriente Medio, y de estos países que son pioneros de la civilización mesopotámica. Incluso Su Santidad, el Papa Francisco ha dicho que es “lícito detener al agresor injusto”. Por Rodrigo Platero, B.A. rodrigoplatero.com 33