REVISTA DIRECCIÓN DE PROYECTOS PMI PANAMÁ MARZO 2017 | Page 30

más dinero solamente”. Los interesados no “compran” el producto/servicio/resultado ni “compran” el proceso que lo produce. Los interesados “compran” la seguridad que tanto con el producto/servicio/resultado como con el proceso podrán alcanzar sus objetivos.

Es responsabilidad del rol de Analista de Negocio demostrar (o al menos convencer) que los objetivos personales concuerdan con los objetivos estratégicos de toda la organización y en particular con los que la solución intenta alcanzar. Y debe hacerlo durante el ciclo de vida de la solución. Es decir, una vez instalada e implementada es responsabilidad absoluta del rol de Analista de Negocio medir que los beneficios esperados se alcanzan y de no ser así iniciar el proceso de retroalimentación.

Por definición de sistema cuando un cambio es introducido en el ambiente se producen nuevos cambios y hay que estar alerta si estos afectan los beneficios esperados. Estadísticas realizadas durante años en varias organizaciones muestran un gran porcentaje (más del 50%) dónde las iniciativas estratégicas no alcanzan los objetivos que se perseguían y por lo tanto los beneficios esperados. Pero muestran algo “peor”: nadie ha “levantado la mano” para marcarlo. Estos estudios publican que muchas organizaciones siguen destinando presupuesto y recursos a mantener productos/servicios/resultados que no alcanzan los beneficios esperados. A menos que sea parte de una estrategia de marca esto es inadmisible. Pero ahora, el rol de Analista de Negocio podrá ayudar a afrontar esta situación ya que es una de las responsabilidades clave que dan sentido a la incorporación del rol en las organizaciones.