Por: Ethan Valdés
Al llegar al lugar fue muy feo por que el guía que nos iba a acompañar “no estaba” eso fue lo que nos dijo la señora que estaba en recepción ya todos bien asustados llega el guía a salvar el día; entramos al museo y ya adentro yo no tenía mi obra solo Dhamar y Pili los demás no sabíamos ni qué onda pero al entrar vi en las escaleras una pintura enorme, y la elegí el guía me contó mucho sobre ella y ahora les hablare un poco de ella: La virgen del Apocalipsis de Miguel Cabrera que representa el arte del virreinato en la pintura se puede ver a Maria al niño que acaba de nacer en la parte de atrás se ve e padre sosteniendo las alas de María los ángeles y la virgen Maria están sobre nubes que representan la divinidad, hay un dragón de siete cabezas que representan los siete pecados capitales para que el dragón no posea a la inmaculada y al niño llega un ejército de arcángeles encabezado por San Miguel tiene un escudo en el que dice quien como Dios en latín y una espada el llamas el niño es llevado por un par de ángeles hacia el padre eterno la representación del padre como rey es muy común en el siglo XVIII , hay una serie de aleles a los costados que tienen instrumentos musicales y coros que representa una alegoría musical una pintura que esta llega de color es por eso que es barroca es multicolor, en el fondo hay un mar que está situado en Grecia a donde es expulsado el personaje de la derecha, el que esta de azul, que en su libro con una ola de ave está escribiendo toda la historia, esta isla se llamaba la isla de Padmos, el mar es profundo como la visión de Juan y es quien contextualiza todo el espacio el marco de la pintura en un marco que se puso en lugar del original.
La vedad es que a mí solo me importaba mi pintura porque era de lo que debía de saber, según yo, depuse pasamos a la pintura de Pili, a la de Fany y luego a la de Zoe, la única que se me quedó grabada fue la de película porque personaje principal daba mucha risa parecía que estaba todo fumado y me causo mucha gracia posterior a ello nos tomamos una foto grupal y me fui a mi casa en moto la verdad es que a mí no me gustó el lugar porque soy cristiano y todas las tonterías que decían solo me dada mucha gracia.
Una experiencia inolvidable