Revista Cultura O septiembre de 2018 Cultura O septiembre de 2018 para web | Página 9
Poesía
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Jairo Carrasquilla
Lore Otálvaro
REGRESO A TU VIDA
Te respiro de nuevo
Es sentir esa sensación que perdí hace un tiempo
Hoy, con los brazos abiertos regreso a tu vida
A esas montañas de alegría que me regalabas
A ese murmullo que me hacías al oído
A las ganas despiadadas que me abrazaban
Con esos pétalos de besos que acariciaban mi boca
Si, de nuevo regreso al lugar donde comenzó mi felicidad
A tu piel canela, a tus ojos gitanos y a tu sonrisa de color
de cielo.
En la cima de tus caprichos, transpiro la esencia de lo
somos
Ya no hay paso atrás, de nuevo regreso a lo que
decidimos ser
Tu conmigo yo contigo y el tiempo sumado.
REGRESO
Se acabaron los puntos suspensivos
Ahora el tiempo está a mi favor
Es contar, uno, dos, tres.
La mente de nuevo se abre a la locura de sentir
Ya en este esquema grabado de signos y letras
Apetecen las ganas de plasmar
Todo un vivir.
Las imágenes se adueñan de mi mente
Crea, sueña, anhela
Y justo en ese momento
Sé y reconozco que mi regreso es certero
No solo a mi vida que ya está
Sino también a la que estoy creando.
Lorena Otálvaro es escritora y apasionada por la poesía. Nació en
Medellín, Colombia, en 1982. Aunque escribe desde los diecisiete
años, su primer poema fue publicado en el año 2016 y en ese
momento salió del anonimato hasta llegar a ser leída en emisoras
de su país. Tiene su propia página titulada Deletreando el amor,
donde publica varios de sus escritos, acompañados de imágenes
sugestivas, dándoles poder a sus poemas.
SOBRESALTOS
Voy encima de mí
con todo este dolor
con toda tu altivez
y la mitad de ti
que consiguen
anular mi conciencia.
Está encima de mi
la esencia
de toda futura cosa.
Me sorprendo.
vidente de creación
en un mundo diminuto.
Hay una dilatada
provocación
en esa mitad de ti...
la poesía.
CASI EL FINAL
Si consigue tiempo
para el tedio...
escuche el ronroneo
de su decadencia.
Ya es una advertencia
su respiración lenta
y su silla de ruedas.
No es fuerte su cuerpo
y faltan pocas horas
para que se atienda
su grito aterrador
y victorioso
de la enjuta blanca.
Carretas negras
habitan su autopista
y sus venas se engullen
en sangre triste.
No obstante,
se sale de las víscerás
para mirar hacia arriba
Y en sus lasos ojos...:
la costumbre del
poema.
Cultura
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