Revista Cover Talavera N.º 60 julio 2019 is COVER JULIO 2019_compressed-2 | Page 13
ACTUALIDAD 13
RESPETO AL
PATRIMONIO
"Para empezar,
la mesa presi-
dencial, con la
insólita imagen
de una mujer
en el centro,
por primera
vez en nuestra
historia".
Se vacían los colegios y se llenan
las piscinas, después de unos
problemillas para la apertura. Lo
que no se llena ni de coña es el
rio. Vale que la primera visita de
la nueva alcaldesa ha sido jus-
tamente para hablar de nuestro
pobre Tajo, pero ahí sigue, arras-
trándose dolorido esperando
que algún día se cumpla la pro-
mesa de aumentar el caudal que
se lleve de golpe la porquería del
cauce y unos cuantos milloncejos
de mosquitos.
Un año más, los hosteleros son
los más perjudicados al ver como
huyen los parroquianos de las
terrazas mientras se llenan los
platos y vasos de esos molestos
bichejos que dicen que no pican,
pero que fastidian…
Ya hemos pasado todas las fi es-
tas habidas y por haber, pero nos
quedan los barrios, ya sabéis, esa
bendita costumbre de Talavera
de que cada Asociación de Veci-
nos tenga su patrón, su misa, su
verbena y su pregón durante los
meses de julio y agosto. Para que
no echemos de menos las ferias.
Se prepara el festival de Jazz, el
acontecimiento del verano, en el
que la programación cultural se
relaja hasta el mínimo.
Y poco más hay que contar, que
junio, con tanta cita electoral, ha
dejado el espacio muy justito
para otros temas. Esperamos que
a partir de ahora haya muchas
novedades, y todas buenas, que
ir contando.
No hay nada que me ener-
ve más que ver una pintada
o cualquier otro atentado al
patrimonio, natural o histórico-
artístico de una ciudad. Hay
que ser muy descerebrado
para pisotear un jardín, arran-
car un árbol o pintar un lien-
zo de muralla o un mural de
cerámica. Pero es obvio que
haberlos, haylos, y no sólo en
Talavera. Sé que es tarea impo-
sible coger a los pintores de
pacotilla, pero, al menos en los
últimos casos, la administra-
ción ha actuado con celeridad,
limpiando de inmediato las
pintadas que nos abochornan
y que no pueden permane-
cer ahí, como sucede en otras
muchas zonas de la ciudad, por
los siglos de los siglos. La ciu-
dad es también patrimonio de
todos, y avergüenza pasar por
calles como Mesones, o Ramón
y Cajal, o tantas otras de pleno
centro de Talavera en las que, a
la tristeza de los locales cerra-
dos, se suman las paredes y los
escaparates pintados, dando
aún más sensación de mugre
y abandono. Todo hay que
tenerlo en cuenta, además de
los monumentos.
Julio 2019