dos al buen vivir).
Es necesario referirse brevemente a un
to en boga últimamente, del "buen vivir."
que su interpretación sería más entendible
mos esa expresión con la fórmula desarrollo
concepto, pues-
Por considerar
si identificára-
+ modernidad.
Los expertos en desarrollo frecuentemente incurren
en el abandono de ese trascendental momento del progreso
que es la modernidad. Pareciera que han olvidado, que se
trata de aquellos procesos, que irrumpieron en Europa de
finales del XVIII - comienzos del XIX y que revolucio-
naron el pensamiento de la gente, la sociología, la cultu-
ra, la ciencia y las artes. Tales indispensables mutaciones
permanecen aún pendientes de producirse en casi todos los
países del continente americano. Sería importante que eco-
nomistas, sociólogos e historiadores ecuatorianos, efectúen
los estudios pertinentes, e indiquen cuál es el punto en que
se halla tal proceso de la modernidad en este país.
Aquí cabe comentar, que sólo una voluntad nacional,
de emprender y ejecutar decididamente una estrategia
de desarrollo adecuada, ajustada a las características del
Ecuador, podría colocar en plazos de tres-cuatro décadas
a su pueblo, a superiores dimensión la condición huma-
na. Hacer extensible la modernidad a todos, es imposible
sin tal despegue económico. De manera que la aplicación
del modelo adecuado ira transformando la vida espiritual,
anticuadas conductas y costumbres ancestrales, y la convi-
vencia de los ciudadanos, inherentes a la modernidad, y en
escalones superiores de civilización. 34
3
Las indagaciones efectuadas evidenciaron
cuáles son los vacíos
existentes más sensibles en las bases económicas en este país. Queda a sus go-
bernantes comenzar por corregir los desequilibrios existentes. los mismos que
son característicos a los países de escaso desarrollo. Justamente esas son las
circunstancias que nos exigen repensar estrategias y elegir otras opciones de
desarrollo.
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