Revista Caminantes 001 - Agosto 2014 | Page 63

De regreso como estábamos cerca de Bahía de Caráquez, nos dejaron en La Punta Bellaca, aunque un poco cansados caminamos hasta La Mesita, queríamos ver una colonia de piqueros patas azules y ahí estaban, reunidos, había tanta tranquilidad que cada uno de nosotros se concentró en lo que le llamo la atención, en los pececillos de las pozas, en observar las aves, en contemplar el mar. Caminamos hacia Bahía, la marea estaba alta, pero teníamos tiempo de cruzar la playa, nos encontramos con una tortuga, parecía cansada o herida, alguien en el camino recogió conchitas, otro encontró un diente petrificado de Megalodón, un antecesor del tiburón blanco, cangrejos, el mar esta vez fue más generoso que de costumbre. 63