la excepción, antes de que la comunidad se
dedicara a la venta de tortillas, esta era muy
pobre, sus habitantes trabajaban como jornaleros, vendían carbón y sembraban algunos productos, entre estos el maíz. Sancán era un sitio de paso ubicado a ambos costados de la vía,
su crecimiento se dio paulatinamente, luego de
que instalaron en esta zona una gasolinera y
aprovecharon la parada obligatoria de algunos
viajeros para vender las tortillas de maíz, las
mismas que se mantenían calientes en canastos adecuados para este fin. Los vecinos del
lugar, al darse cuenta que cada vez era mayor
la demanda de tortillas, empezaron a invertir
y construir cabañas con materiales de la zona,
las dotaron de mesas y sillas para brindar una
mejor atención a los clientes, y adicionalmente
ofrecieron otros productos, entre estos el café
pasado y la tortilla de yuca.
Este valor agregado que los habitantes de
Sancán le dieron al maíz, que ellos mismos
sembraban, les cambió la vida, ya que de estos negocios muchas familias han criado a sus
hijos, les han educado, construido sus casas
y lo más importante, han ofrecido trabajo a la
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