Cactus
De Ostgut a Berg-Hain
L
a semilla de Berghain fue plantada a comienzos
de los 90 bajo unas condiciones culturales que
formaron las señas de identidad de su marca.
La reunificación y la caída del Muro, la influencia
del techno de Detroit y unas inusuales condiciones
de permisividad institucional fueron algunas de
las circunstancias que permitieron que los locales
underground proliferaran en la década de 1990 y
principios de los 2000 en la ciudad.
El creciente interés por el techno entre los
jóvenes, sumado a la persecución social a la
homosexualidad, hizo que Berghain naciera como
una urgente necesidad en la capital. Los promotores
Michael Teufele y Norbert Thormann celebraban sus
fiestas Snax en diferentes localizaciones de Berlín,
concebidas como una mezcla de rave de techno
hardcore y fiesta sexual extrema para la comunidad
gay.
En 1998, los seguidores de Snax se mudaron a su
primera localización permanente, una factoría que
antiguamente había servido para la reparación de
trenes en el distrito de Friedrichshain.
El local, bautizado como OSTGUT,
comenzó a enfocarse en fiestas que
ofrecían el techno de mejor calidad
de la ciudad, abiertas ahora a público
de cualquier orientación sexual.
Este lugar clandestino y alejado de
la realidad priorizó la programación
de Djs locales sobre los grandes
nombres y se convirtió rápidamente
en el epicentro de la nueva música
underground europea.
En 2003, OSTGUT tuvo que abandonar la fábrica
para dejar paso a la construcción del gran Mercedes-
Benz Arena. Así, Teufele y Thormann emprendieron
la búsqueda de un nuevo local que no encontró su
enclave mítico hasta pasados dos años. La espera y
la constancia dieron sus frutos y no lejos del antiguo
OSTGUT, dieron con una estructura de hormigón
brutalista de los 50 que se erigía entre Kreuzberg
y Friedrichshain. Esta planta de energía eléctrica
abandonada del gigante sueco Vattenfall fue la
elegida para albergar el club y su ubicación para darle
nombre.
Espacio, Cubo y Masa
M
ientras Ostgut fue creado por la necesidad,
el éxito de Berghain convirtió el club en un
negocio. Teufele y Thormann no solo querían
liberar a Berghain de los caprichos de un propietario
externo, sino también formalizar la conexión del
club con el arte de la que incluso el gobierno tenía
constancia. El crecimiento del turismo en la capital
durante los últimos años estuvo muy relacionado la
escena del clubbing, con millones de euros derivados
de estas actividades nocturnas. Los dirigentes de la
ciudad ofrecieron a Berghain importantes cantidades
de dinero para que la oferta cultural del club se
ampliase con financiación estatal. Esto impulsó la
creación de espacios dedicados exclusivamente a
la promoción de las artes visuales, y finalmente, la
compra del edificio.
En la primavera de
2011 nació Kubus, un
espacio de forma cúbica
dedicada a actuaciones
en vivo y exposiciones
de arte. El espacio
surgió para dar cabida a
nuevas posibilidades que
compartirían localización
con el imparable club
de techno y colocó en
el mapa cultural a esta ruina industrial. Aquí tuvo
lugar la exposición ALLE: Worker’s Pearls. Más de la
mitad de los trabajadores de Berghain eran además
creadores. Para la ocasión, se invitaron a cuarenta
de estos profesionales para que compartieran los
secretos mejor guardados de Berghain a través de
su mirada artística. Se presentaron obras de pintura,
escultura, fotografía, y performances, realizadas por
La persecución social a
la homosexualidad hizo
que Berghain naciera
como una urgente
necesidad en la capital.