Si cada uno desde nuestra pequeñez y nuestras limitaciones , pero también con nuestro esfuerzo , encontrásemos la manera de convertirnos en mejores personas , con sentido de la responsabilidad y del compromiso para lograr un mundo más equilibrado , habríamos dado un paso de gigante .
Ya tenemos la vacuna contra el virus y contamos con una gran ayuda ( aunque algunos irresponsables no lo crean así ), pues esta vacuna nos devuelve la esperanza , y ha sido gracias al esfuerzo de muchos científicos que han trabajado sin descanso en los laboratorios de todo el mundo . Agradezcamos este esfuerzo y apoyémoslo aceptando la vacuna como escudo para nuestra salud . Pero , al mismo tiempo , debemos vacunar nuestra mente también , para aceptar los cambios , que serán muchos .
Esta situación también nos ha regalado algo , nos ha obsequiado con tiempo para salir de la vorágine y detenernos a reflexionar , silencio para contrarrestar el ruido que distorsiona nuestros pensamientos y a veces soledad para conectar con nosotros mismos . Muchos dejarán esto atrás como una experiencia más y volverán a ser los mismos que eran , y nada habrá cambiado ; otros habrán aprovechado esta experiencia para mirar hacia dentro y crecer .