40 revista
MAYO • junio 2018 reflexión
Reflexión para cada día
ELIJO CAMBIAR MI SISTEMA DE CREENCIAS ELIJO LA SALUD PLENA, LA FELICIDAD Y LA PROSPERIDAD
Elijo dejar de lado el Sistema de Creencias que me llevó a enfermarme y que me impedía sentirme Feliz, en Calma, Armonía y Plenitud. Elijo adoptar un Nuevo Sistema de Creencias que me conduzca a la Salud Plena, a la Felicidad y a la Prosperidad. Elijo evitar la influencia negativa de quien me dice o cree( aunque no me lo diga) que lo que tengo es incurable y solo controlable con tratamientos que me afectan más. Elijo creer que la solución para el problema de salud que tengo, está adentro mío y decido firmemente y en forma inquebrantable, hacer todos los cambios de alimentación, de hábitos y de actitudes, que me permitan desintoxicarme de cuerpo y alma y que me ayuden a reactivar mi propia Fuerza Natural de Autocuración. Elijo buscar por todos los medios, la forma de disfrutar y hallar placer en lo que me ayude a sanarme, abandonando la errónea conducta, de solo encontrar placer en lo que me enfermaba. Elijo aceptar, para mis dolencias, solo tratamientos naturales o no, que me aporten más beneficios que perjuicios, en sana complementación, pero entiendo que siempre, lo más importante, es y será corregir las causas dietético-ambientales y psicosocioespirituales y evitar, en el futuro, volver a reactivarlas, para que sea más posible mi real sanación y la prevención de recaídas. Elijo creer que la enfermedad o desgracia que he padecido o padezco, algo me ha venido a enseñar. Decido investigar cuál es el mensaje que en ella se oculta y acepto el desafío de descubrirlo. Elijo aprender lo que el Destino me quiere enseñar, por mi propio bien, aunque me cueste admitirlo. Y decido que otra vez aprenderé de una forma más inteligente y no a través de otras enfermedades que yo mismo me genere o de la reactivación de la que ahora estoy empezando a sanar de verdad. Elijo creer en la existencia de Dios, cualquiera que sea la Religión que tenga o
no tenga y cualquiera sea el nombre que para Él elija, de sus posibles 64 nombres ó quizás más, si entre ellos incluimos al concepto del Tao y al del Campo Unificado. Y también elijo creer en la existencia de la Vida después de la Muerte, simplemente porque me hace sentir mejor esta creencia, me hace perder el miedo, sentirme protegido y guiado y me permite disfrutar más de la Vida y sobrellevar con más entereza las dificultades y además … porque nadie puede tener una total seguridad de que Dios no exista, ni de que no exista nada después de la Muerte y ante las dos opciones, creer o no creer, elijo la opción que mejor me hace sentir durante el tiempo que dure mi vida y que con mayor paz, me ayudará a morir sin sufrimiento, el día que me toque partir, develándose allí el gran misterio, porque ante la duda ¿ Qué hay de malo con la esperanza?. Esta pregunta, decido hacérmela a mí mismo también, con respecto a mi posible sanación, aunque otras personas, médicos, psicólogos, familiares o quien sea crean que lo mío no tiene cura posible y traten de“ protegerme” de eventuales engaños y de las“ falsas expectativas” que me provoquen quienes ellos definen como“ charlatanes”. Decido confiar en mi propia intuición y en el Médico, Psicólogo y Guía Espiritual Internos, que tengo adentro mío y me propongo sacarles las telarañas y ponerlos a trabajar en el proceso de mi Autosanación: otros quizás me podrían engañar, pero Ellos, jamás. Lo que debo decidir sincerándome conmigo mismo, es si realmente me quiero sanar o siento que ya hice en este plano todo lo que vine a hacer y ya se va acercando el tiempo de cambiar de plano de existencia. Si decido que realmente quiero vivir muchos años más, debo anotarme 5 ó si es posible 10 razones trascendentes y propias( no solo por mis seres queridos) para estar vivo dentro de 10 años y cuando pase esta década, pedir una prórroga por otra y otras más, hasta que Dios y yo mismo, acordemos que ya sea el tiempo de partir. Si no se me ocurren esas razones propias y trascendentes para estar vivo dentro de 10 años, debo pedir ayuda a quienes me puedan guiar para encontrarlas, porque si no las tengo, es lógico que le deje espacio en esta Tierra, a muchos que sí las tienen y están esperando su turno para venir a hacer aquí la experiencia de vivir, para hacer lo que solo aquí se puede hacer y no en el Más Allá. Pero por sobre todas las cosas, elijo aprovechar de ahora en más, cada minuto que me queda de Vida, para dejar de quejarme y empezar a valorar la Vida, ya que es un hermoso regalo de Dios, para que nos animemos a crecer espiritualmente contribuyendo con nuestro humilde grano de arena, a que la Luz prevalezca sobre la Sombra y a que los Planes de Dios, sean una concreta bendición para esta Tierra y así, con esa Paz y esa Felicidad que logre, será mucho más posible sanarme de lo que sea que tenga y será mucho mayor la evolución que espiritualmente obtenga, al final de mi existencia terrenal.
Reflexión propuesta por el Dr. Jorge V. Esteves para sus pacientes, alumnos y lectores, publicada al final del libro " La Dieta de la Felicidad y la Bío- Armonización "
Gentileza de Gustavo López Terapeuta en Biomagnetismo médico. Estudiante de medicina de la Universidad Nacional de Mar del Plata.