Muchos artesanos Wixárika dicen que al elaborar piezas de arte
huichol vacían su alma y la dejan plasmada en su trabajo. Pierden la
noción del tiempo y tardan horas en inspirarse y aterrizar las ideas,
patrones, relieves y figuras que configuran sus obras. Expresan amor y
sentimientos de una forma única.
Por lo mencionado en el párrafo anterior podemos afirmar que el arte
huichol es más que un arte. Es una forma de expresión usada por miles
de personas desde hace millones de años. Es el patrimonio de una
cultura. El fruto de la fe y adoración de un hombre a su Dios. Aún así,
la gente lo ve como una simple manualidad. Como una gran
oportunidad de mercado. Como un negocio con mano de obra barata.
Abramos los ojos y valoremos las tradiciones y creaciones que forman
parte de nuestra cultura ¿Hasta qué punto
tenemos que llegar para empezar a valorar las cualidades que hacen
único y maravilloso a nuestro México?
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