El 7 de junio del mes pasado por primera vez en la historia electoral del México contemporáneo, pudieron contender algunos candidatos independientes, sin la necesidad de tener una militancia partidista que respaldase dichas candidaturas.
Durante muchos años el viejo régimen de partidos había obstaculizado esta posibilidad de ejercer un derecho constitucional sin el aval de las burocracias partidistas.
A partir de los movimientos que en el año 2009 llamaron al voto nulo, aunado a muchas organizaciones de la sociedad civil y al hartazgo generalizado hacia los partidos políticos, se logró una primera reforma constitucional, en la cual se reconoce el derecho de los ciudadanos, a participar de manera individual en los procesos electorales. La reforma a la fracción II del artículo 35 de la constitución, faculta para solicitar el registro como candidatos independientes a cualquier cargo de elección popular.
En el proceso electoral de este año 2015, participarón 118 candidatos independientes que lograron cubrir los excesivos requisitos que impone la legislacion electoral, de los cuales sólo 6 lograron el triunfo en las urnas.
De los 118 candidatos independientes, 70 contendieron por una presidencia y 3 de ellos triunfaron en: García en Nuevo León, Morelia en Michoacán y Comonfort en Guanajuato. Uno ganó la gubernatura de Nuevo León (La cuarta entidad más grande de México), Manuel Clouthier triunfó en una diputación federal por Sinaloa y un joven logra el triunfo en una diputación local por Jalisco.
Este es el primer balance, para quienes creemos en un sistema de libertades es un resultado magro, insuficiente.
Además varios de estos triunfos los obtuvieron candidatos con larga trayectoria política, el caso del "Broco" en Nuevo León y Clouthier en Sinaloa.
Carlos Oropeza Bailey
22 Reflexiones / Julio, 2015
Candidaturas independientes en México
¿Alternativa real o refugio de políticos rechazados por los partidos políticos?