RECUERDOS: Huellas Impresas en el Alma 002. Mayo. 2013 | Page 25

Alejandra, no, esa es la más fácil de todas, 10x10 son 100 Así, jugando aprendíamos y hasta hacíamos bromas cuando alguno se equivocaba, en época de colegio, casi no nos veíamos, porque estudiábamos en lugares distintos, pero cuando llegaban las vacaciones, ellos venían a nuestra casa o nosotros íbamos a la suya, a veces pasábamos tardes enteras en el parque, por la mañana aseábamos la casa para que nos dejaran salir en la tarde y cuando no podíamos nos las arreglábamos para jugar y divertirnos en la casa. En una ocasión que fuimos al parque encontramos un bus desbaratado, nos metimos dentro de él y empezamos a explorarlo, ahora que ha pasado el tiempo, lo recuerdo de una forma divertida, aunque no sé de qué manera, nos metimos al motor y ahí cupimos los seis, estuvimos jugando largo tiempo dentro de él hasta que sentimos mucho calor y nos fuimos para la casa a bañarnos, estábamos hechos mugre, resultaba divertido pasar ese tiempo con ellos, éramos primos, pero ante todo éramos los mejores amigos, cómplices, compinches. Sin embargo, a pesar de ser niños, a pesar de nuestros juegos, de nuestra felicidad, la realidad en ese momento era un tanto dura y los padres de mis primos pasaban por una época difícil económicamente, por lo cual tomaron la decisión de irse a vivir a otro país, en busca de mejores oportunidades, consideraron que era lo mejor para sus hijos, que allá tendrían mayores oportunidades para progresar, nuestros primos estaban tristes cuando llegamos a la casa, tenían lagrimas sobre sus mejillas, intentamos calmarlos sin saber que pasaba, entonces nos fuimos al parque donde solíamos contentarnos cuando estábamos tristes y ahí nos contaron lo que pasaba. Juan: Ya no vamos a poder volver a jugar como siempre Yo: ¿Porque? ¿Ya no nos quieren? 24