Primero usó un libro, y observó que la fluorescencia persistía en la placa, pero que la intensidad sobre la placa había disminuido.
Luego reemplazó el libro por materiales más pesados, como metales, y observó que la radiación era absorbida en varios grados, siendo el platino y el plomo los únicos materiales que la detenían completamente.
La otra genial idea de Roentgen fue reemplazar estos materiales por su propia mano, y observó que los rayos la atravesaban y producían sobre la placa la sombra de sus propios huesos, delineados por las partes blandas o carne de su mano. A partir de este momento, la Medicina no sería la misma.
El viernes 8 de noviembre de 1895 Roentgen hizo un descubrimiento trascendental que cambiaría el mundo de la medicina de entonces. Había descubierto que por medio de esta radiación podía ver a través de materiales, incluyendo la propia piel. ¡Las estructuras internas del cuerpo se podrían hacer visibles sin necesidad de cirugía!.
Roentgen era muy aficionado a la fotografía amateur, y ya que las películas fotográficas formaban parte del inventario general de la investigación sobre los rayos catódicos, no le fue demasiado difícil reemplazar la pantalla de platinocianuro por una placa fotográfica, con lo que obtuvo un registro permanente (una foto) de los fenómenos visuales, lo que hoy conocemos como radiografía.
Primer premio nobel de Física de 1901