Disminución del Punto de Congelación
El punto de congelación de una disolución es la temperatura a la cual se comienza a formar los primeros cristales de disolvente puro en equilibrio con la disolución. En el caso de la formación de una solución, cuando a un solvente puro se le agrega un soluto, éste no sólo disminuye la presión de vapor del solvente sino que la solución se congela a una temperatura inferior a comparación con el solvente.
Cuando una solución que contiene un soluto no electrolito se congela, el elemento que llega al punto de congelación es el solvente; es decir, las moléculas de soluto normalmente no se disuelven en el soluto solidificado, y quedan en un resto de la solución restante, la cual se concentra con el paso del tiempo.
Esto conlleva a que la presión de vapor del sólido se iguale a la presión de vapor del líquido con el que está en solución, provocando una caída en la presión de vapor del solvente, y a su vez, una mayor inter-reacción entre las moléculas del soluto y el resto del solvente en la solución, provocando la necesidad de liberación de mayor cantidad de calor, por parte de la solución restante, para llegar a un estado de congelación. Esto significa que la solución congelará a una temperatura inferior que la del solvente.