QUERIDO HIJO ESTAMOS EN HUELGA Querido_hijo__estamos_en_huelga_-_Jordi_Sierra_i_F | Page 9
vacaciones. Qué manía con la ducha. Y qué manía con
lo de los dichosos dientes. Total, se le caerían con
setenta u ochenta años, como al abuelo Valerio. Si se
los lavaba por la noche, ¿para qué volver a lavárselos
por la mañana? ¡No los había usado, por lo tanto
seguían limpios!
Mientras salía de la habitación, hizo memoria.
¡Había quedado con Ángel para jugar al fútbol en el
parque!
Vale, ese sí era un buen plan.
Así que fue a buscar a su madre, que como
trabajaba de traductora en casa, no tenía un horario
riguroso ni se pasaba el día en la calle.