Raras
Enfermedades
Anorexia nerviosa
El miedo a engordar puede llegar a alcanzar la forma de
un fobia donde los estímulos temidos son las comidas
(sobre todo las que más se asocian a una ganancia de
peso), situaciones sociales en que hay que comer, personas determinadas relacionadas con la comida, la propia
figura o mostrarla, y el propio peso. La ansiedad es continua, incluso cuando se esta por debajo del peso deseado
por miedo a ganar algunos quilos. Consecuentemente, se
produce la evitación fóbica de estos estímulos, provocando,
por ejemplo, la restricción en la cantidad y calidad de los
alimentos que, a medida que se mantiene, actúa como un
refuerzo del propio dominio y autocontrol. Pero la evitación
de alguno de estos estímulos es difícil cuando no imposible
(p.e. evitar nuestra imagen o nuestro cuerpo).
La anorexia no es únicamente el miedo a engordar. Existe
una sobrevaloración de la delgadez que puede llegar a la
obsesión (siendo el único tema de preocupación) y verse
acompañada de elaborados rituales relacionados con la
comida y el ejercicio físico. Pese a estas semejanzas con
el trastorno obsesivo compulsivo, la anorexia tiene una
serie de rasgos distintivos como son la alteración en la
percepción del propio cuerpo o la amenorrea (ausencia de
menstruación).
La idea sobrevalorada de adelgazar y el perfeccionismo
llevan a someterse a un férreo autocontrol caracterizado
por estrictas dietas y por aumento de la actividad. De esta
manera hay un aumento de la tensión, de la ansiedad y
de la irritabilidad, tanto cuando se están cumpliendo los
planes, como cuando se quiebran. En este segundo caso,
aumenta la probabilidad de que se realicen actividades
compensatorias como el vómito, el uso de laxantes o el
ejercicio físico desmesurado. Estas actividades sirven para
reducir la cul HHH[