QUE BONITO ES MANZANILLO NUMERO 6 | Page 10

cartagena

Caminaba sobre la transversal 54 cercano al embarcadero una zona muy poblada de frente a la Isla Manzanillo, andaba en busca de un taxi o un bus que me llevara a la zona del arzobispado cercano a la casa de la Chichería en un barecito que acostumbrábamos a ir donde había quedado de verme con mi escudero Wayne, el calor era sofocante ese calor caribeño que a pesar de eso me gusta, como que me transporta hacia mis orígenes, finalmente logre tomar el bus que avanzo rápidamente por la diagonal 21 hasta alcanzar la avenida Pedro Heredia y que me llevaría a mi destino, en cada calle que cruzaba llevaba en mente la belleza abigarrada de las casas y como juegan con los colores turquesa del mar caribe, es tan común este tipo de construcciones que fueron legislados muchos años atrás para mantener la mesura arquitectónica de la región, amalgamada con la alegría de sus habitantes aunque sus lenguas y calos sean diferentes.

Ensimismado iba en mis pensamientos que no repare cuando llegamos al aparcadero de la Zona de Chicherías descendí casi frente al Teatro Heredia, un teatro con un parecido al Degollado de Guadalajara, y que al ver su programa y quien se presentaría me di a la tarea de comprar dos boletos para su entrada por la Noche.

EL Teatro Heredia se encuentra a escasos metros de lo que fue la casa de Gabriel García Márquez la cual está frente a las Bóvedas de Sta. Clara, una zona amurallada que da a ese increíble mar de aguas cristalinas del Atlántico.

Esa Noche comente con Wayne que tendríamos unas clases de Portugués en vivo, y degustamos una deliciosa velada en la feria del Jazz del Teatro Heredia al compás de la música de la cantante Brasileña Luciana de Souza, quien cantó con la lozanía del ruiseñor acompañada del gran guitarrista Romero Lubambo, era una noche calurosa, no sé si por la algarabía que despertaba su presentación en el festival internacional de Jazz de Cartagena de Indias o por el calor imperante en el caribe.

El Paroxismo llego al escucharse RETRATO EM BRANCO E PRETO” Retrato en Blanco y Negro…

Já conheço os passos dessa estrada

sei que não vai dar em nada

seus segredos sei de cór

já conheço as pedras do caminho

e sei também que ali sozinho

eu vou ficar, tanto pior

o que é que eu posso contra o encanto

desse amor que eu nego tanto

evito tanto

e que no entanto

volta sempre a enfeitiçar

Ya conozco los senderos del camino

Sé que dan a la nada, sus secretos son negros

Ya conozco las piedras del camino

Y sé también que ahí, solo, estaré

Mucho peor,

Lo que sé es que puedo

Contra el encanto de ese amor, que niego tanto

Evito tanto y que en su encanto, me vuelve a hechizar

Aquel día conviví con aquella sensibilidad hecha mujer, pasión que inunda el contenido de la creación, la luz que invade, el misterio que hechiza, aquel arrebol que contiende ante la pureza del cristal y el sonido que reverbera en el vacío del universo, y convertido en la sensible voz del portugués hizo de nuestro momento una agradable velada con la cercanía del mar caribe, y una ciudad amurallada como fortaleza para cubrir los embates de los corsarios

Cartagena 1999

Por Oscar Hernandez