QUE BONITO ES MANZANILLO NUMERO 15 | Page 24

QUE BONITO ES

MANZANILLO

A MI MADRE

Por Rosario Iglesias

Tenían sus ojos mil abejas presas

y el oro de las mieses en desengrano

Su cuerpo semejaba las palmeras

al ondear con el viento tan ufano.

Era preciosa como el sol del día

y mágica como el mar en plenilunio

era una máquina incansable y vivía

para sus hijos y el trabajo rudo…

Nunca supo su vida de placeres

que brinda el dinero y los desmanes

y prefirió el jabón y el lavadero

y así lo asumió sin más ambages.

No tuvo castillos ni dinero

pero su corazón, era un tesoro,

mas grande que aquel con que

Aladino tuvo bienes, alhajas y oro.

Así era mi madre, sepan que

nunca había escrito para ella,

solo en mi corazón he mantenido

su recuerdo guardado como estrella.