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a madre naturaleza te ha vandalizado lo
cual ha causado que pierdas tu esencia. Tu
esplendor y belleza fue removida y tu gente anda
flotando. Quedaron sin esperanza, tienen miedo,
no saben qué hacer. Me pregunto por qué tu flora
desapareció tan rápido como un hechizo y tu
fauna se ha escondido. Tus montañas son siluetas
de barro por tus cielos que no paran de llorar. Tus atardeceres componen parte de tus maravillas
y tus playas son parte de tu esplendor. Aquí
te espero, a la orilla del mar mirando hacia
el horizonte pidiéndole a Agüeybaná y a mis
ancestros que te ayuden a volver a tu bello origen
que todos conocemos. Con tus árboles frondosos
y tus ríos majestuosos, colinas con historias y tus
cuevas misteriosas.
¡Ay mi Puerto Rico! No sabes lo mucho que me
duele saber que tal vez no volverás a ser como
antes. Mis memorias de ti han sido borradas y mis
lugares favoritos destruidos. Nunca pensé que te
tendría que dejar atrás y sobre todo nunca pensé
que te perdería de esa manera. Con el tiempo
me tendré que acostumbrar al hecho que nunca
serás igual pero por ahora te pido, mi Puerto Rico,
restaura tu magia. Trata de encontrar tu esencia,
trata de restaurar tu flora y fauna. Enséñale el
camino a tu gente y vuelve a ser ese pueblo que
todos amamos. Cuánta falta que me haces, mi Borinquen. Solo
pienso en lo bella que eres y el amor que te tengo.
Con el tiempo te sanarás y pronto volveré a mi
madre tierra. Mis pulmones besarán tu aire fresco,
nadaré en tus playas y otra vez me uniré con esos
bosques de mi niñez. Ya pronto volveré a ti mi
bella patria, te proveeré el amor que nadie te ha
regalado y que te mereces. Estoy orgullosa de ser
hija tuya, mi bella isla del encanto.
texto: NUBIA RAMIREZ DE JESUS
arte y diseño: ELISE GELLMAN
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