Sanfermines
texto: MIGUEL LACUNZA
arte: AUDREY VILLALOBOS
E
sa sensación de cuando eres niño y
Santa Claus va a venir a tu casa... esas
hormigas en el estómago... ese no poder
dormir por la emoción de qué te habrá
regalado. Una emoción de la infancia que
muchos añoran. En Pamplona, cada año
mayores y pequeños la vuelven a sentir
cuando se acerca el 6 de Julio. Te levantas,
te empiezas a poner las ropas blancas, te
atas a la cintura la faja roja y te guardas
en el bolsillo el pañuelo rojo, sabiendo
que en unas horas empezará la mejor
semana de tu año. Y llegas a la ciudad
solamente unos minutos antes del cohete
y te empiezas a reunir con tus amigos y
caminas hacia la plaza del ayuntamiento.
Y al medio día te encuentras dentro de
una masa de gente saltando de alegría,
con una lluvia de vino que sale de las
botas y los vasos de la gente alrededor
tuya. Una experiencia única con la que
solo algunos se pueden relacionar.
Los Sanfermines son fiestas que se
celebran en Pamplona, una ciudad en el
norte de España, para conmemorar al
co-patrón de la ciudad, San Fermín. Es
conocida nacional e internacionalmente
en particular por una de las tradiciones
de la fiesta, el encierro. En este acto las
personas corren por las calles seguidas de
toros, todas las mañanas de las fiestas.
El encierro y los Sanfermines empezaron
a ser más y más famosos después de que
el escritor americano Ernest Hemingway
los inmortalizara en Fiesta o The Sun
Also Rises. Esta novela de 1926 sigue
a un grupo de ingleses y americanos
que viajan a París y consecutivamente a
Pamplona durante las fiestas. La fama
de Hemingway en países anglosajones
empezó a atraer decenas de miles de
turistas de Estados Unidos, Australia y
Reino Unido. Venían para ver y correr con
La fiesta se celebra en honor a San Fermín
un santo Católico y patrón de dos regiones,
Navarra y Amiens. Su nombre completo es
Fermín de Amiens y fué el primer obispo de
Pamplona. Vivió una vida muy corta, desde el
272 D.C. hasta el 303 D.C. Y uno de los mayores
símbolos de las fiestas, el pañuelo, es en honor
suyo. Ya que murió decapitado en Francia por
predicar la religión cristiana. El pañuelo rojo
representa la sangre corriendo por su cuello.
los toros y los Sanfermines les brindaron
ésto y mucho más, dándoles razones para
volver año tras año.
Es una fiesta en la que personas de todas
las edades disfrutan al igual, con más
de 400 actividades distintas durante los
ocho días de celebración. Unas de las
actividades más famosas es la comparsa
de los Gigantes y los Cabezudos, cuando
éstos últimos persiguen a los niños
armados con porras de goma espuma.
Hay muchos conciertos y bailes gratis.
Uno de los más antiguos y con más
historia es el Baile de la Zapatilla, una
tradición que tiene lugar todos los días
después del encierro. Pero cuando más
ambiente hay es en la noche y las horas
previas.
durante los sanfermines la noche
empieza a las once, cuando truenan
los fuegos artificiales. En este concurso
internacional las pirotecnias de todo el
mundo compiten por el campeonato. Cada
noche hay 30 minutos ininterrumpidos
de explosiones en el aire. Indican el inicio
de la fiesta para los jóvenes y la hora de ir
a casa para los mayores.
Inmediatamente después empiezan los
conciertos, normalmente de grupos o
cantantes sin demasiada fama. Pero de
vez en cuando sí viene gente con mucha
historia y talento. Con el ritmo puesto, la
gente se dirige hacia bares, plazas o calles
para reunirse con más amigos y seguir
las celebraciones. Las noches acaban
“oficialmente” a las ocho de la mañana,
con el cohete que arranca el encierro del
próximo día. Y esto sería un día “típico”
para un joven duran te los sanfermines.
El encierro es de lejos la tradición más
famosa de las fiestas y por lo que son
conocidas alrededor del mundo. No
se sabe el inicio exacto pero hay
escritos que lo mencionan desde
1787. Se dice que al principio los
animales eran desplazados desde
los corrales hasta la plaza de
toros, para la corrida. Cuentan que
un día distintas personas entraron
inesperadamente al recorrido. Cada día
más y más gente saltaba a correr y con el
tiempo se estableció como una tradición.
Desde 1925 sorprendentemente solo
quince personas han fallecido durante
el encierro. La muerte más reciente
sucedió en 2009 cuando un hombre fue
corneado en la aorta y murió minutos
después. Aunque cada año hay entre
200-300 personas que tienen que ser
atendidas por distintas razones, la más
común no son cornadas sino contusiones
por caídas. Es cierto que el encierro se
ha hecho más y más peligroso conforme
incrementa la fama de las fiestas y más
gente quiere correr con los toros.
Hoy en día alrededor del mundo hay
mucha división de opinión en lo que
se refiere al uso de animales para el
entretenimiento. Y todos los años hay
protestas en Pamplona contra los festejos
ya que gran parte de ellos se centran en los
toros, con el encierro por la mañana y la
corrida por la tarde. Por ahora las fiestas
siguen declaradas por el gobierno español
como “Corridas legales y
declaradas Bien de Interés
Cultural o Patrimonio
Cultural Inmaterial”.
La mayor parte de la gente de la ciudad
o que visita la ciudad no acuden a las
corridas de toros en la plaza. Sin embargo,
el encierro tiene un récord de más de
20.000 corredores totales durante los siete
encierros de la semana. Además, millones
de personas los ven retransmitido por
distintas cadenas en la televisión nacional
e incluso en algunas de otros países.
Las fiestas de San Fermín forman una
gran parte de mí. Son algo de lo que
puedo estar orgulloso, por lo único de
las fiestas y la relevancia internacional de
éstas. Además es un tiempo en el que te
olvidas de todos los problemas que tienes
y en el que todo el mundo está contento.
Recomiendo a todos los lectores que si
tienen la oportunidad de viajar
a Pamplona durante estas
fechas que lo hagan. Es una
experiencia singular y
muy especial que nunca
olvidarás.
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