puño & letra Spring 2020 | Page 14

texto: ELLA DOUTHIT diseño: HILARIO GONZALEZ menstrual no está limitada a solo gente sin casa o refugio, sino también a los que viven sin ingresos suficientes. En el mundo, hay 500 millones de menstruadores que sufren de pobreza menstrual. ¡500 MILLONES! Algunos tienen que decidir entre la comida y los productos menstruales. En estos casos, se ven obligados a usar cosas diferentes, como papel cartón o calcetines para mantenerse limpios y aseados. La falta de acceso a los productos menstruales seguros causa que estos menstruadores falten a clases en la escuela, al trabajo, y a los exámenes importantes para su ciclo menstrual. cortesía: Sabza Impuestos sobre la libertad menstrual Recientemente, la justicia menstrual es un tema que está circulando en nuestra clima social. La difusión de conocimiento sobre las adversidades y desafíos de la gente que menstrúa puede salvar bastantes vidas. No importa sus circunstancias, unos y unas van a menstruar. Tener su período no solo es intempestivo, sino también incómodo, humillante y doloroso. Por esto, muchos tienen que faltar a la escuela, el trabajo, las obligaciones o los exámenes por la falta de materiales necesarias para su salud. La verdad es que el acceso a los productos menstruales es un derecho humano que muchos no tienen. Si te parece curioso que uso palabras como “gente que menstrúan” en vez de decirles “mujeres”, es porque no todos los que menstrúan se identifican como mujeres, y tampoco todas las mujeres menstrúan. El movimiento de menstruación es muy inclusivo a todos, porque la manera de hacer cambio es dejar los tabúes y tener personas que no menstrúan como aliados en el movimiento. Una reciente encuesta de “Always Confidence”, revela que una de cada cinco niñas tiene que faltar a la escuela por causa de la pobreza menstrual. Este número es muy impactante, y ni incluye a menstruadores que no se identifican como mujeres dentro de la cifra. Muchas encuestas similares son limitadas por solo tener en cuenta a las ‘mujeres’ o ‘niñas’. También en los sistemas escolares, se separan las niñas de los niños para enseñar sobre la menstruación. Esto reitera como la menstruación es conocida como un problema de ‘la mujer’. Ahora existe en 33 estados del país un impuesto de 6.85% en los productos menstruales. Los que crearon estas tasas no toman en cuenta cómo funciona la menstruación. El impuesto grava productos femeninos como artículos de lujo en vez de necesidades básicas de higiene. Comprarlos no es barato sin el impuesto adicional., puede costar hasta $300 cada año. Aunque el impuesto no parece causar un gran cambio en el precio, para las personas de bajos ingresos no les alcanza el dinero para obtenerlos. Cuando alguien no puede comprar unos productos por su precio o no tienen agua corriente para mantenerse limpia y segura, se llama pobreza menstrual. La pobreza En la vida humana los períodos no son nada nuevo. Entonces, ¿por qué seguimos sin apoyo adecuado para los menstruadores? Cuando se usan objetos que no son sanitarios es incómodo, desmoralizante y hasta peligroso. Puede causar infecciones que arriesgan la vida. Algunos centros de salud y refugios tienen productos gratuitos para los que necesitan, pero no es suficiente para todos. Afortunadamente, hay muchas nuevas organizaciones que tratan de luchar contra la pobreza menstrual como TYET, PERIOD. Movement, y más. Las metas de estas organizaciones se centran en quitar el estigma de la menstruación, poner un fin a la pobreza menstrual y empezar un nuevo conocimiento de cómo la falta de productos menstruales puede afectar a alrededor de 28% de nuestro mundo. El 19 de octubre, muchos se juntaron en todas partes del país para celebrar los períodos en la primer protesta del Día de Período. Yo participé en la de Portland organizada por PERIOD., y fue una experiencia maravillosa. En toda mi vida, nunca había oído tantos gritando y cantando sobre los períodos. Antes todos teníamos miedo de pelear contra las injusticias. Ahora es impresionante ver a tantos abogando por el nuevo comienzo del movimiento menstrual.