PROYECTO OVNIS 1 - LA BASE ANTÁRTICA PROYECTO OVNIS 1 - LA BASE ANTÁRTICA | Page 34
comprender y aceptar la realidad de la integración psicosomática. Este error más que
simplemente gnoseológico, ha convertido al hombre en dependiente del estimulo físico
para cognocer, pero decimos que es su única realidad semiconsciente, porqué no
tiene la posibilidad de identificar la causa del estímulo, que siempre es metafísica, o si
se prefiere, psicológica, con excepción del fenómeno externo que pudiera estimular
sus sentidos. En este caso el estímulo externo funciona a la inversa, es decir, el efecto
y ya no la causa es psicológica e igualmente subconsciente.
Veamos, el hombre actual es incapaz de detectar una disfunción psicosomática,
percibiendo sólo el síntoma, que da como resultado su dependencia clínica.
Hipocondría, falta de resistencia a la enfermedades, debilidad física, y MENTAL. Claro
que lo mental es aquí tan sólo una percepción subconsciente de su realidad
ontológica.
El alma se manifiesta como tensión energética; por eso es difícil percibirla, es energía,
y aunque una cultura de paz dosifica la tensión en el sujeto colectivo, las pasiones
siempre deben ser canalizadas por sistemas de control social, en este contexto
democrático y globalista, la religión y el entretenimiento son las únicas válvulas de
escape permitidas. Sin embargo las condiciones sociales deberían ser óptimas para
que esto funcione, y están muy lejos de serlo. La pobreza y la miseria son variables de
las que el sistema no puede prescindir a la hora de generar tensión, pues la tensión
del alma individual y colectiva, alimenta y cohesiona las superestructuras en las que el
hombre vive inserto; esta tensión que se refleja en malestar social, inseguridad, altos
índices de criminalidad, etc., son necesarias para el sistema, y por eso se avala la
corrupción y la mentira como modelo cultural.
El hombre al desconocer que la tensión es un reflejo condicionado de su alma,
alimenta sin cesar las superestructuras; reflexionando sobre esto podemos apreciar
que el alma funciona, o sea, es funcional, pero el individuo es inconsciente a su
proceso, aunque en algún grado sea consciente de sí mismo. Si esa conciencia de sí
mismo es mayor por la práctica de alguna forma de meditación, yoga, control mental,
etc., el alma va tornándose semiconsciente para el individuo, logrando, si la evolución
en esos senderos de “iluminación” es constante, cierto control sobre las tensiones.
Por estas razones afirmamos que el hombre común, es sujeto manipulable para las
técnicas de control social, esto porqué su fuerza volitiva sólo obedece al estímulo
condicionado, o es simplemente escasa para dominar su plexo.
Como hemos visto, si bien el hombre común puede ser relativamente consciente a los
agentes de su plexo, cuerpo y alma, es completamente inconsciente, en un nivel
profundo, al agente más importante de su complexión, el espiritual; Y decimos que es
el más importante porque es extrapsicológico, no participa de la psique, aunque se
manifiesta a través de ella. Trataremos de brindar algunas pautas sobre este misterio
a continuación.
Fisonomía General del Hombre Semi-integrado.
Antes de comenzar haremos una aclaración. Cuando nos referimos a hombre
integrado, asumiremos que es un modelo recuperado del ancestro original, o en su
34