Prehistoria de extremadura PREHISTORIA EXTREMEÑA revisado n 2019 | Page 125

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la parte superior aparece representada una lanza de punta ancha y larga,
una espada con empuñadura, hoja ancha y lanza de punta denominada
“lengua de gato”, característica del Bronce final peninsular. Debajo apare-
ce un disco con un largo mango que posiblemente fuera un espejo. Hay una
figura de un hombre muerto estilizada e ingenuamente grabada en la parte
derecha de la estela correspondiendo, quizás, a un guerrero jefe?, al que
tal vez estaba dedicada la estela. En la parte central está representado un
escudo con escotadura en V y en la parte inferior se representa un carro de
cuatro ruedas uncido a su tiro, faltando en ellas una referencia a los radios,
lo que hace pensar que tal vez fueran macizas. De lo que serían los caballos
se aprecia bien esquematizado el de la izquierda, dibujado con las cuatro
patas y la cabeza, siendo su representación cinco líneas verticales que par-
ten de una horizontal. Del mismo tipo de escudo que el representado en esta
estela hay antecedentes hacia el 800 a. de C. en Chipre y Creta.

En 1934, George Leisner descubrió una curiosa estela menhir algo
mayor de tamaño que la de Solana de Cabañas, en un lugar próximo a la
Granja de Toniñuelo, en Jerez de los Caballeros, con el grabado de una fi-
gura humana de tosco rostro, adorno en la cabeza, collares, brazos, manos
y un cinturón decorado con puntos, todo ello de forma esquemática, fechán-
dose en el Bronce final.

Otra estela-ídolo es una de Hernán Pérez (21), que como las dos an-
teriores se encuentran en el Museo Arqueológico Nacional en Madrid. Sobre
un bloque de granito procedente de necrópolis y representando otra figura