Portaligas #08 - Primavera 2018 | Page 32

32 > HISTORIA DE EQUIPO la vida” -como ellos mismos se describen- decidieron armar un equipo de baby fútbol para jugar en un torneo de verano en Cachagua. Felipe Dittborn, Matías Alcalde, Diego Gazitúa, Emilio Saenz y Martín Vilajuana fueron los encargados de bautizar el equipo. Por eso años cursaban recién octavo básico y, como es lógico, fueron miles de nombres los que surgieron, pero terminó siendo Boedo el que más convenció. Vilajuana, que vivió dos años en Argentina, explica que al final terminó siendo ese fanatismo por el fútbol y la posi- bilidad de tener un nombre atípico, el que los llevó a bauti- zar así al equipo. “Era una época en que el fútbol argentino estaba mucho más de moda que ahora. Se veía mucho los partidos Boca-River, sobre todo en la época en que estuvo Manuel Pellegrini en River y San Lorenzo”, comenzó diciendo. Lo que ellos querían era un nombre que saliera de lo común, y así fue como se acordaron del barrio de San Lorenzo de Almagro. “Para no tener un nombre tan típico, pensamos en Boedo, sector donde está ubicado el club”, explicó. Al final, el nombre les permitió diferenciarse de los demás, pero solo hasta cierto punto, porque era tal el ‘boom’ del fútbol argentino por esos años que igual hubo otros conjun- tos con nombres bien arraigados en el balompié trasandino. “Era tanto el fanatismo en esos años que era muy común ver más de un equipo con algún nombre referenciado al fútbol argentino. Es más, en el mismo campeonato que jugamos en Cachagua había uno que se llamaba ‘Juan Román’, así que tampoco fuimos tan originales”, recordó entre risas Vilajuana. Con el paso de los años, Boedo comenzó a crecer y poco a poco comenzaron a sumar más jugadores, algo que para el mismo Vilajuana marca considerablemente la esencia del equipo. “La unión es lo que nos representa. La base del equi- po se ha mantenido desde siempre, y eso es algo que no se da en muchos equipos. A veces algunos parten de una forma y con el tiempo se van diluyendo”, señaló. Asimismo, destacó que “en nuestro caso, de los fundadores que estuvieron en el equipo de octavo básico hasta llegar a segundo medio, me atrevería a decir que aún se mantiene el 90 porciento. Unos 10 o 12 jugadores continúan en el equipo hace más de 15 años, donde pasamos por el baby y el futbo- lito, hasta llegar al fútbol 11”. Fueron múltiples campeonatos en los que participaron pero, sin duda, uno que más los marcó fue el conseguido en la Liga de Campeones del 2007. UN TÍTULO QUE SE CELEBRÓ EN ARGENTINA Boedo fue partícipe de la Liga de Campeones del 2007, ven- cieron a Real Santiago y se terminaron consagrando como los flamantes campeones. Quizás, era el título más importante hasta el momento, y fue por esa misma razón que decidieron celebrarlo como corresponde: con una salida a Buenos Aires. No todos tienen la posibilidad de celebrar una copa fuera de Chile, y es por esa razón que el viaje lo recuerdan como una de las mejores vivencias con el equipo, sobre todo por las anécdotas que marcaron la aventura en el extranjero. “Fue casi todo el equipo, y lo mejor es que llegamos todos vestidos con traje al aeropuerto, tipo delegación oficial de un plantel profesional. Eso fue bastante entretenido y es una anécdota que, quizás, pocos pueden contar”, detalló el mis- mo Martín Vilajuana. Para Felipe Dittborn, actual presidente del club, esta fue una aventura diferente, sobre todo porque les coincidió con al- gunos partidos de Copa Libertadores con equipos chilenos en Argentina. Como fanáticos del fútbol que son, sabían que no podían es- tar ausentes y dijeron presente en más de un estadio. “Vimos Boca-Colo-Colo y River Plate- Católica. También aprove- chamos de ver San Lorenzo-Lanus, en cancha de Boca. Ahí estuvimos en el sector popular, donde se pone la Gloriosa Butteler, barra brava de los de Boedo”, rememoró Dittborn. Pero las celebraciones no solo han sido para los jugadores Senior, que fueron parte de ese campeonato del ‘07, ya que los más nuevos también tuvieron la posibilidad de protago- nizar un verdadero campañón en el 2015. CAMPEONES INVICTOS Boedo fue campeón en más de una oportunidad, pero uno de los que más se recuerdan fue el conseguido en 2015. “Ese debe ser de los más recordados por todos”, comentó Diego Gazitúa, uno de los fundadores de Boedo que actualmente también tiene labores de entrenador en la categoría Senior. Pablo Mackena, actual delantero extremo de la categoría Junior -que también fue parte de la consecución de dicho certamen- piensa muy parecido al DT, y destacó la forma en que se ganó. “La única vez que fui campeón fue en ese torneo. Hace varios años que el equipo no lo podía conseguir y en esa campaña fuimos campeones invictos, algo que no sé si se había dado antes en la liga San José”, destacó el atacante. Para Vilajuana, otro de los que integró ese plantel, uno de los factores claves para conseguir ese título estuvo en la “motivación” de cada uno de los jugadores. Y en ese sentido, explicó que “no es fácil tener una banca gi- gante de 20 jugadores, y eso nos permitió marcar diferencias sobre los demás equipos. En este tipo de ligas, el tema de la motivación termina siendo súper importante, sobre todo para equipos como los Senior en que estoy ahora, donde después el físico empieza a pasar la cuenta”.