Portafolio MCCIE Maidoli Matos Portafolio+MCCIE+Maidoli+Matos+ | Page 19

hermanos son la evidencia de que las adversidades, la droga y la muerte pueden ser vencidas con el amor, el estudio y unos buenos maestros en tu vida Me motiva cursar estos estudios de postgrado en el área de Orientación; mis 40 años, mi recién graduación que a mí me ha sorprendido (más que a nadie), después de ser la más desatacada en la Primaria, en los Bomberos Juveniles, en la Secundaria y en la vida en el Barrio; que ingresé en 4 Universidades y pude elegir sin dificultad, que tuve Becas completas y en ese momento no lo logré ¿Por qué? Porque había dentro de mí un torbellino de emociones, como un garabato de estambre, desde mi cerebro, nublando la visión, envolviendo y apretando el corazón por las decisiones que tomé, por el camino que decidí recorrer y sólo una mirada, una escucha y una Orientación en la UCV me guió. Pude deshacer esos nudos, aceptar lo que era yo y las circunstancias en mi vida, entendí que las metas y el recorrido lo decido yo; con mi tiempo, energía, persistencia, resistencia y amor a la vida, que es mía y es un regalo de Dios. Me motivan 21 años en la Educación con niños, madres, padres, adolescentes y colegas que creen como yo; que una Maestra es una sonrisa en la mañana, un abrazo en el recreo y muchas oportunidades para crecer, como persona, ser humano, compañero, que cree en la bondad de las personas, que se forma para enseñar a los demás a conseguir sus potencialidades y contrarrestar sus debilidades, que sigue aprendiendo cada día desde la humildad de saber mucho y otras veces no saber nada. Me entusiasma ese saludo que te reconoce al pasar los años en la calle, te busca en las redes sociales o simplemente poder ver a un estudiante convertido en un hombre o mujer de bien. Me motiva saber o no saber, pero confiar en que un estudiante mío…¡se salvó! Que no murió en las drogas del barrio, que no perdió su talento deportivo en la delincuencia, que no o mataron en el funeral de un vecino, que no la mató el novio y dejó a tres hijos, que no lo mataron para robarle su carro, que no lo asesinaron porque entró en la Academia Militar, que no lo mataron porque no entregó los kilos de carne de había comprado, que no lo mató el novio de la hermana por venganza, que no lo mató su hermano de 15 años por accidente a sus 12 años, que no murió el día que ingresó a la cárcel por robarse una harina en el abasto, que no la violaron en el estadio y todos escucharon., que no murió al practicarse un aborto (son mis historias reales, de compañeros del liceo reales hasta los 15 años).