HUMO Y CRISTALES
Cuando vi tu sonrisa brillante
dibujada en tu cara
me enloquecí entre tus brazos.
Ahora soñaré con tus risas en todos los lugares.
Sé que volverás algún día
y qué eres un sin fin al pasar la montaña,
sé que por gritar nadie es más que nadie,
lo sé.
Tú eres la mano que me ayuda cada mañana y atardecer
para no perecer entre humo cristales,
para no ser alma .
Nunca te olvidaré,
lo sé, porque nunca me dejarás atrás.
Quiero volver a sentir el humo entre mi venas,
quiero volver a sentarme a tu lado, en la oscuridad,
entre humo y cristales.
Darius Sofronescu
Jon Aguinaga
Sara Rosales