Por su naturaleza y sus límites derivan de la lógica capitalista, de los requerimientos de la producción, de las relaciones sociales propias del sistema; para lo que el Estado se organiza entre entes públicos y realiza la actividad pública.
Los gastos de servicio de deuda: comprende el servicio de deuda externa y el servicio a la deuda interna.
El gasto público se genera de las operaciones del Estado.
Los gastos de funcionamiento: comprenden los servicios personales, los gastos generales, las transferencias y los gastos de operación comercial.
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Los gastos de inversión: aquellos destinados a la construcción de infraestructuras, creación o adquisición de bienes de naturaleza inventariable, necesarios para el funcionamiento de los servicios.