PETS EXPERTS
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CUANDO EL CEREBRO
DE TU PERRO
TE HABLA
Problemas y enfermedades neurológicas en perros.
Las enfermedades neurológicas en perros pueden afectar su calidad de vida significativamente, ya que involucran el sistema nervioso central y periférico. Estos trastornos pueden variar desde condiciones leves hasta enfermedades graves que requieren intervención veterinaria urgente.
ENFERMEDADES NEUROLÓGICAS
Epilepsia: Es uno de los trastornos neurológicos más comunes en perros. Se manifiesta a través de convulsiones recurrentes, que pueden variar en intensidad. Las convulsiones pueden ser focales, afectando una parte del cuerpo, o generalizadas, involucrando todo el cuerpo. El tratamiento generalmente incluye medicamentos anticonvulsivos para controlar la frecuencia y severidad de las crisis.
Enfermedad del Disco Intervertebral: Esta enfermedad ocurre cuando uno o más discos en la columna vertebral se hernian o degeneran, presionando los nervios y causando dolor, debilidad y en casos graves, parálisis. El tratamiento puede incluir reposo, medicamentos antiinflamatorios y, en casos severos, cirugía para aliviar la presión sobre la médula espinal.
Meningitis y Encefalitis: Estas son inflamaciones del revestimiento del cerebro y la médula espinal, o del propio cerebro. Los síntomas pueden incluir fiebre, cambios en el comportamiento, y rigidez en el cuello. El tratamiento generalmente requiere antibióticos o medicamentos antiinflamatorios para controlar la inflamación y la infección.
Síndrome de Cushing y Síndrome de Addison: Ambos trastornos endocrinos pueden tener efectos neurológicos, como cambios en el comportamiento o debilidad muscular. El tratamiento se enfoca en manejar el desequilibrio hormonal subyacente mediante medicamentos o terapia hormonal.
DIAGNÓSTICO Y TRATAMIENTO
El diagnóstico de enfermedades neurológicas en perros suele requerir una combinación de historial clínico, exámenes físicos y pruebas específicas como radiografías, resonancias magnéticas o análisis de líquido cefalorraquídeo. El tratamiento varía según la enfermedad, pero puede incluir medicamentos, cirugía y terapia física.