Pets Experts Magazine Febrero 2025 | Page 8

CIENCIA

EL AMOR y la ciencia

Los perros han sido nuestros fieles compañeros durante más de 16,000 años , desde que sus ancestros , los lobos grises , comenzaron su proceso de domesticación en el Paleolítico Superior . A pesar de esta larga historia compartida , la ciencia aún trabaja para descifrar muchos misterios sobre el Canis familiaris , desde sus capacidades cognitivas hasta sus peculiares comportamientos .

DEBATE SOBRE LA INTELIGENCIA CANINA
Aunque el pastor belga malinois ha sido señalado como la raza más inteligente en estudios recientes , los científicos mantienen cautela al respecto . Con 354 razas distribuidas en 10 grupos principales , y sin pruebas estandarizadas para medir sus habilidades mentales , determinar cuál es la “ raza más lista ” sigue siendo un desafío pendiente .
MAESTROS EN LA LECTURA EMOCIONAL
La evolución ha dotado a los perros de una notable capacidad para comprender las emociones humanas . Investigaciones recientes publicadas en Animal Behaviour demuestran que sus cerebros reaccionan específicamente ante el llanto humano , provocándoles estrés y motivándoles a buscar formas de aliviar el malestar de sus compañeros humanos .
CAPACIDADES LINGÜÍSTICAS SORPRENDENTES
Los perros han demostrado poder comprender
Las sorprendentes verdades sobre nuestros amigos caninos .
sustantivos específicos , como “ pelota ”, asociándolos con objetos concretos . Sin embargo , su procesamiento lingüístico tiene límites : aunque pueden entender palabras individuales , no está confirmado que puedan crear imágenes mentales complejas que combinen varios conceptos .
GUARDIANES DE LA SALUD
El extraordinario olfato canino no solo sirve para detectar sustancias ilícitas ; estudios recientes han revelado que pueden ser entrenados para detectar enfermedades como el Parkinson con una precisión de hasta el 86 %, abriendo nuevas posibilidades en el diagnóstico médico temprano .
MISTERIOS SIN RESOLVER
Algunas características caninas continúan desconcertando a los científicos . El movimiento de la cola , por ejemplo , sigue siendo objeto de debate : aunque se reconoce su función comunicativa , las teorías sobre su origen varían desde la selección genética hasta la preferencia humana por patrones rítmicos .
UN DATO INQUIETANTE
A pesar del profundo vínculo afectivo que desarrollan con sus dueños , existe evidencia forense de que los perros pueden recurrir a consumir el tejido de sus compañeros humanos fallecidos .
Este comportamiento , lejos de ser por hambre , parece estar motivado por la curiosidad y la preocupación , siguiendo patrones específicos que comienzan por la cabeza y el cuello .