SINFONía ELECTORAL
identidad, como los colores y las tipografías.
De la misma forma, los partidos políticos son reco-
nocidos por escudos, logotipos, banderas, colores y
tipografías, pero no siempre logran sistematizar su
uso y estabilizarlo.
Para lograrlo, hay una herramienta fundamental. Se
trata de los manuales de normas gráficas que pue-
den realizarse en soportes digitales de forma tal que,
quienes diseñen piezas de comunicación en cual-
quier lugar del país, utilicen los mismos identificado-
res gráficos y también otros elementos que se pue-
den estandarizar como son las formas gráficas del
slogan y las fotografías oficiales de campaña.
Una forma de administrar estos recursos es siste-
matizarlos en un manual y subirlos a una página
de Internet, que puede o no tener clave de acceso,
y así ponerlos a disposición para realizar piezas de
comunicación de manera descentralizada. De este
modo se favorece el accionar a distancia, aseguran-
do que se mantengan los parámetros de diseño de
manera tal que las piezas resultantes sean leídas co-
mo componentes de un sistema cuya identidad que-
dará centralmente garantizada.
Otro aspecto a tener en cuenta es el legal. Obvia-
mente, es necesario registrar el nombre (del partido,
línea o sello con el que se va a competir y los colo-
res) antes de empezar a utilizarlos.
Pero, además, hay que programar el uso en el tiem-
po de la marca. Construir un nombre lleva esfuer-
zo, tiempo y dinero. En muchos casos, esa inversión
se hace sobre denominaciones de frentes o alian-
zas que duran poco tiempo. Y si el uso posterior
de esas marcas no se prevé con anticipación pue-
de quedar en manos de cualquiera o, simplemen-
CAPÍTULO 5
COMUNICACIÓN
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te, entrar en un conflicto legal que no permita se-
guir utilizándolo.
Dado el desarrollo de Internet, se deben registrar
también los dominios respectivos para poder ope-
rar las páginas web y redes sociales.
Al momento de elegir
el color para este nuevo
frente se tomaron en
cuenta dos características.
Una es que la base
del frente es la UCR de
Corrientes, que es el único
distrito donde el partido
radical utiliza historica-
mente el verde. Además
la sigla ECO se asocia
con ecología o medioam-
biente.
La marca buscó rescatar
las particularidades
regionales, por eso se uti-
lizaron los colores de la
bandera de los pueblos
originarios.
Nuevo Espacio Abierto
es el nombre de una
línea interna de la UCR
del Chaco, originalmente
iba a llamarse Nuevo
Espacio pero se le
agregó Abierto para
que las siglas sean NEA
que es como se conoce
a la región.
El GEN se creó a partir
de un grupo de dirigen-
tes que se alejaron
de la UCR pero que
llevaban en su sangre
las ideas del radicalismo.
De ahí nacieron el nom-
bre y el isotipo inspirado
en las representaciones
de las cadenas genéticas.
El nombre fue votado
por los militantes en el
primer congreso partida-
rio entre tres opciones.
Nació de la alianza de
la UCR, el socialismo y la
Coalición Cívica. La re-
comendación fue UNEN,
por ser sintético y conno-
tar una idea positiva. Pe-
ro en estos procesos no
siempre prima el asesora-
miento profesional. El so-
cialismo exigió que apa-
reciera la marca que
utiliza en Santa Fe, Fren-
te Amplio Progresista y
así quedó Frente Amplio
Unen, un nombre que se
alargó innecesariamente
y al que los medios llama-
ron FAUNEN.
El nombre del candidato
En muchos casos, además de estabilizar el nom-
bre del partido, se debe programar como se iden-
tificará al candidato.
Algunos optan por nombres de pila, otros por
apodos o apellidos o por la combinación de estos.
Incluso una inicial puede servir; como la K que
identifica al kirchnerismo.
Elegir cómo la campaña llamará a su candidato no
debe ser una decisión caprichosa, sino responder a
alguna construcción intelectual previa que puede es-
tar vinculada a cómo conoce la gente a los candida-
tos (Chacho por Carlos Álvarez; Pino por Fernando
Solanas), a la dificultad para pronunciar su apelli-
do (Margarita por Stolbizer), al intento de conse-
guir familiaridad con el público (Adelina por Ade-
lina Dalesio de Viola), a minimizar el peso de un
apellido (Mauricio por Macri o María Julia por Al-
sogaray).
Un caso particular es como solía referirse Cristi-
na Kirchner a su marido fallecido, hablaba de ÉL,
como si fuese una deidad, lo cual complementaba
con frases como la utilizada en el discurso de cie-
rre de campaña de 2011, donde dijo: «Yo se que
Él está en todas partes…»
No es algo nuevo, baste leer el ensayo de Roland
Barthes sobre el Citroen DS para comprender de
qué se trata.