MIROSLAVA
MARZO DE 2018
U
na casa de madera con
más de cien años de
historia, ubicada a un
costado de la plaza Herrera. Dicha
casa fue restaurada en 2010 con
fondos de la oficina del Casco An-
tiguo y de la Junta de Andalucía; el
nombre de Boyacá proviene de un
buque de guerra colombiano de la
misma época en que fue construida
la casa. El fuego fue tan fuerte que
arrasó con dos casas más que esta-
ban a un costado de la casa Barco:
la casa Rosada y la casa de Francia.
Gracias a Dios no hubo muertos,
pero sus residentes lo perdieron
todo. Dentro de la casa Boyacá vi-
vían tres estudiantes de música que
pertenecen a la Fundación Danilo
Pérez, y de la cual forman parte del
sexteto Los Nietos del Jazz; esta
agrupación viene formándose des-
de que eran muy niños y han cre-
cido juntos como familia musical,
luchando por sus sueños en medio
de la delincuencia, las drogas y la
disfuncionalidad. Uno de ellos se
llama Oliver, él no estaba cuando
ocurrió el incendio. Narra su